Este miércoles 1° de mayo, frente a los 57 diputados como representantes del pueblo deberá ponerse en pie la presidenta Laura Chinchilla y rendir cuentas de su labor de cara a su último año de gobierno.
Tendrá que tomar fuerzas y leer su discurso en un escenario muy particular pero no en términos positivos para Chinchilla, según apunta el politólogo Francisco Barahona. Deberá convencer de sus aportes al país ante una efervescencia de ticos que crece en disgusto hacia a su gestión, sacando apenas la cabeza de una polémica que movió al país y la obligó a echar marcha atrás con el plan de concesionar la carretera San José – San Ramón, un incremento de manifestaciones y de bombardeos en redes sociales, en la que incluso han diseñado un conteo para registrar su salida como Presidenta.
Es por eso que asegura que “la presidenta debe hacer su mejor esfuerzo por demostrar acciones positivas” ¿Lo logrará? Para el politólogo es muy difícil que su discurso logre aplacar la caída de su imagen y prestigio.
Para el experto un elemento que podría dar mayor seguridad a la mandataria este 1° de mayo es que la fracción oficialista retome la presidencia de la Asamblea Legislativa, lo que a criterio de Barahona le podría permitir hasta rendir sus palabras con una sonrisa.
Aseguró que otro elemento que se traslapará en el mensaje de la mandataria es el nivel de movilización que se genere este 1° de mayo. Si por los anuncios se saca la proyección, le jugará en contra, pues deberá afrontar una de la manifestaciones más grandes, según han sostenido los sindicados, pues la molestia hacia al Gobierno ha llegado a nivel nunca antes registrado.