Cerca de las 8 a.m. el nuevo Directorio legislativo ya compartía su primer café con la presidenta Laura Chinchilla, quien lo convocó para marcar la prioridades de su gobierno en el último año de legislatura.
El encuentro tuvo lugar ayer en Casa Presidencial, con la participación del ministro de la Presidencia, Carlos Ricardo Benavides. “El tiempo apremia y tenemos una intensa agenda legislativa en favor del país”, expresó durante la reunión la mandataria en su cuenta de Twitter.
PRIORIDADES
Después de la conversación, Benavides declaró a la prensa que si bien el Poder Ejecutivo tiene prioridades, la intención es estar receptivo a los proyectos que también impulsen las demás fracciones, por eso habrá un acercamiento directo con los jefes de bancada.
Específicamente el gobierno se centrará en el Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea, el proyecto Ley sobre Investigaciones Biomédicas, las reformas institucionales y al Reglamento Legislativo, así como el proyecto Ley para Desincentivar Capitales Externos.
Además dijo que otros se irán sumando en el camino, como el de contingencia eléctrica y sobre temas fiscales.
ACERCAMIENTO
Luis Fernando Mendoza, presidente del Congreso, explicó que además de conocer la línea del Ejecutivo, el Directorio planteó sus ideas a la mandataria como es continuar con la construcción del edificio legislativo y la intención de aumentar las reuniones entre ambos, sin embargo aceptó que no quedó prevista una logística de encuentros.
Con un directorio compuesto por dos diputados cristianos, Carlos Avendaño y Justo Orozco, quienes se han caracterizado por asumir posiciones radicales, Benavides rechazó que esto cambie el panorama de la negociación de los proyectos de ley, pues son funciones distintas.
Un ejemplo claro es el proyecto de fertilización in vitro, el cual impulsa el Ejecutivo y Avendaño mantiene una posición de rechazo no negociable.
El Ministro de la Presidencia también negó que los miembros del Directorio que no son de la bancada oficialista hayan solicitado el apoyo del gobierno a proyectos específicos a cambio de sus votos.
FUERA OROZCO
El ministro de la Presidencia, Carlos Ricardo Benavides, hizo pública la decisión del Poder Ejecutivo de rechazar la continuidad del diputado Justo Orozco como presidente de la Comisión de Derechos Humanos.
Al respecto Orozco negó tener intenciones de continuar e insistió en su posición de rechazo a los homosexuales y el respaldo a proyectos legislativos para esta población.
“Yo soy radical en mis posiciones, estoy en contra de sociedades de convivencia y estaré siempre, dentro o fuera de la Asamblea. Yo amo a mi país y quiero lo mejor para él. Esa preferencia sexual y ese desarrollo inadecuado de la identidad sexual no le conviene al país”, sentenció Orozco.
Benavides aseguró que será un legislador de otra bancada el que la asuma y negó que Carlos Avendaño, otro miembro del Directorio y diputado cristiano, haya mostrado interés.
Sobre la composición de la Comisión de Derechos Humanos, el presidente del Congreso, Luis Fernando Mendoza, dijo que será resultado de la negociación entre bancadas y estas deberán presentarles sus propuestas.
MENDOZA NO TOMA POSICIÓN
Para evitar levantar polémica el nuevo presidente de la Asamblea Legislativa, Luis Fernando Mendoza, evadió responder cuál es su posición en temas como el respaldo a los derechos de la población homosexual.
Insistió en que se reservaría su posición para que eso no inclinara la discusión. Eso sí, aceptó que es muy cercano a la Iglesia Católica, aunque también resaltó: “Yo tengo una mente abierta”.