Con un breve discurso de tan sólo 6 minutos se dirigió la presidenta Laura Chinchilla a miles de feligreses que se reunieron en la explanada de la Basílica de Los Ángeles para conmemorar el 378 aniversario del hallazgo de La Negrita.
En su último mensaje como mandataria y a los pies de la Patrona de Costa Rica Chinchilla evitó referirse a temas polémicos que están en discusión en el país y que son sensibles para la Iglesia Católica, tales como los proyectos de ley que están en la corriente legislativa referentes a sociedades de convivencia y la fertilización in vitro.
Por el contrario tiñó su discurso pidiendo comprensión por sus errores, resaltando la gestión de su Gobierno y agradeciendo a la Virgen de Los Ángeles por renovar su fe.
“Recibí el país en medio de una de las más grandes crisis de la economía internacional y con una de las mayores crisis fiscales que hemos conocido. Pese a estas circunstancias, logramos en estos tres años que nuestra economía creciera y generara más empleos. La falta de recursos no nos impidió alcanzar la más alta inversión social de los últimos años en beneficio de los más pobres y vulnerables”, expresó Chinchilla.
¿CONFRONTACIÓN?
El ministro de Comunicación, Carlos Roverssi, reconoció que la Presidenta no abordó este tipo temas pues según alega no era el espacio.
La Iglesia Católica asumió la misma posición del Gobierno, y también evitó exponer frente a las autoridades la posición de fe respecto a temas como la convivencia de personas homosexuales.
El obispo de Cartago, monseñor José Francisco Ulloa, externó que no expusieron su posiciones ya que querían enviar un mensaje de mayor positivismo.
“Si hoy tanto el que hizo la homilía que fue Monseñor Loría fue muy positivo de ver todos los valores que tiene Costa Rica y que realmente es más lo que nos une que lo que no separa, ciertamente hay aspectos que son poco difíciles porque se oponen directamente a la doctrina de la Iglesia sin embargo no es contra nadie, sino es defender los grandes principios”.