Durante su campaña electoral, la principal promesa del entonces candidato presidencial Rodrigo Chaves fue bajar el costo de vida de manera rápida y una vez electo reiteró su compromiso firmando en agosto de 2022 un decreto que pretendía bajar el costo de los medicamentos.
“Aquí se pagan medicinas más caras que en Madrid o en Londres. ¿Por qué? Porque lo hacen por decreto y lo vamos a quitar por decreto. ¿Usted sabe que hace 22 años no dejan traer moléculas modernas, baratas, productivas y que no maten al productor, al consumidor y al ambiente?”, sentenció Chaves durante una actividad de su campaña política en marzo de 2022.
Con esta firma del decreto, el presidente buscaba cambiar las reglas del juego referentes a homologación e importación de medicinas, lo cual a su criterio ampliaría el dinamismo del mercado, la competencia y ayudaría a bajar los precios.
“Esto va en la ruta correcta para bajar los precios de los medicamentos en las farmacias del país y estamos quitando los monopolios de importación.
En Costa Rica, en este momento, quien registra una medicina ante el Ministerio de Salud, la tradición ha sido otorgarle un monopolio para la importación o producción de esa medicina y hoy vamos a destruir ese monopolio”, sentenció en aquella oportunidad.
No obstante, un año después el presidente pidió un mes más porque el decreto aún no surtía efecto y la variación en el costo de los fármacos todavía no impacta el bolsillo de los costarricenses.
Hoy, a dos años de ocupar la silla presidencial, DIARIO EXTRA le consultó nuevamente por qué no logra bajar el precio, a lo que el mandatario achacó la culpa a los grupos de poder que tienen intereses o negocios en la industria farmacéutica.
“Es un problema. Hicimos homologación, pero no está funcionando. Hay poderes enormes, se sabe que un grupo controla todos los puntos de distribución. Tratamos de que la Caja vendiera medicinas y hubo una resistencia enorme en mandos medios. Quizá no quieren ponerles competencia a La Bomba, Fischel y otras cadenas”, comentó Chaves.
¿CUÁNTO VARIÓ EL PRECIO?
Datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) revelan que el precio de las medicinas en general subió un 10% en comparación con diciembre de 2020.
Ahora, si se compara la estadística desde la llegada de Chaves, el precio no representa ninguna desaceleración, ya que subió un 5% a mayo de 2022 y un 5% más a marzo de este año.
Únicamente registró un descenso durante el primer trimestre de 2021, es decir, antes de que Chaves llegara a la presidencia.
En este apartado el medicamento que más subió a nivel porcentual en los últimos cuatro años es el que se utiliza para controlar los nervios, costándole un 28% más que en 2020.
Ahora bien, si se analiza desde la llegada de Chaves, el mayor incremento se registró en los fármacos que utilizan los asmáticos, que aumentaron un 13% a partir de mayo de 2022, costando hoy un 26% más que en 2020.
De igual forma, el único producto que sí bajo desde la llegada del mandatario fue el utilizado para tratar la gastritis, el cual a mayo de 2022 costaba un 8% más, mientras que ahorita solo representa un incremento del 5% desde 2020.
¿QUÉ DICEN LAS FARMACÉUTICAS?
Ante esta situación DIARIO EXTRA consultó a la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma) si existe algún problema que impida bajar el precio de los medicamentos, así como lo afirma el presidente en entrevista.
Sin embargo, Fedefarma se desligó de cualquier señalamiento al indicar que las compañías farmacéuticas “son únicamente un eslabón en la cadena de distribución y no establecen el precio final al consumidor”.
Agregó que en Costa Rica existe una oferta variada de productos, con diferencias de precios para que el consumidor elija el que mejor se adapte a su bolsillo.
“En el mercado existen en promedio más de 160 opciones de medicamentos por cada segmento, permitiendo a la población escoger libremente el tratamiento adecuado para su padecimiento, según sus posibilidades económicas.
Gracias a esta composición del mercado, los costarricenses tienen acceso a medicamentos innovadores, genéricos de marca y genéricos puros, donde es importante que el Ministerio de Salud garantice su eficacia y seguridad”, declaró Victoria Brenes, directora ejecutiva de Fedefarma.
Al mismo tiempo, para fomentar la competencia y que esto impacte de manera positiva los precios para el consumidor, Fedefarma recomienda que las autoridades emitan mayores políticas de flexibilización.
“La libertad de mercado es la forma más eficiente para lograr el acceso a los medicamentos en un ambiente de sana competencia, conducta ética y compromiso con la calidad de los medicamentos. Por eso trabajamos de forma armónica con las autoridades sanitarias y confiamos en que las acciones del Estado deben ir dirigidas a agilizar procesos (principalmente los regulatorios), mejorar condiciones de competitividad del país y acelerar la adopción de la innovación”, añadió Brenes.
COMPRAN MÁS CARO, VENDEN MÁS CARO
El alza en el precio final al consumidor es un reflejo del alto precio que pagan las casas farmacéuticas para comprar los productos, según reportó el Colegio de Farmacéuticos en enero de 2023.
Por ejemplo, en promedio durante 2021 las farmacias pagaban a las distribuidoras ¢716 por 20 tabletas de acetaminofén de 500 miligramos (mg), mientras que en 2022 pagaron ¢732.
En el caso de los diuréticos, pasaron de pagar ¢4.100 a ¢4.895; es decir, casi un 20% más. Mientras que el jarabe expectorante Mucosolvan compositum subió de ¢6.529 a ¢9.826, lo que se traduce en un costo final para el usuario superior a ¢12.000 en algunas farmacias.
Esto impactaría directamente al consumidor costarricense. Incluso, si se compara con otros países latinoamericanos, un fármaco que aquí ronda los ¢14.000, en Colombia cuesta aproximadamente ¢3.000.
El aumento de costos ha sido constante desde 2020, cuando llegó la pandemia por Covid-19 y el precio que las farmacéuticas pagan a las distribuidoras subió más del 80% en algunos productos.
MÁS CAROS
Marcos Martínez
“Los medicamentos no han bajado. Si alguien dice que han bajado es mentira, cada día el precio está más alto. En este país desgraciadamente los medicamentos son para los ricos, los pobres no tenemos acceso a la salud de calidad. Si la Caja no se los da, uno tiene que ver qué hace porque los precios no dan un respiro. Todo sigue por las nubes, hasta las cosas básicas que uno necesita para sobrevivir”.
Juan Aguilar
“Están extremadamente caros. Realmente es un abuso lo que se está cobrando en este país por los medicamentos. No siento que haya un control que pueda manejar los precios y aquí hay gente que tiene dinero, pero la gente que no, la más pobre, tendrá que morirse por no tener cómo comprar medicinas. Es una ingratitud lo que se le hace a la población más pobre”.