Aunque durante los últimos dos años la inflación ha sido baja e incluso negativa en 2024, esto no se ha reflejado en el valor de muchos de los principales alimentos y bebidas que se consumen de forma diaria en los hogares costarricenses.
Así lo evidenció un seguimiento realizado por el economista Javier Adelfang, quien en enero de 2022 visitó un supermercado orientado a las clases populares y registró los precios de 15 productos, la semana pasada regresó al mismo establecimiento y pudo constatar que prácticamente todos tuvieron un incremento para el comprador final.
Un ejemplo claro de ello es el precio de la barra de mantequilla. En 2022 costaba ¢1.000, ahora ¢1.450, es decir una variación del 45%. Lo mismo sucede con la bolsa de café que pasó de ¢1.760 a ¢1.930 y el litro de leche de ¢650 a ¢730, en el mismo periodo analizado. Lo anterior supone aumentos del 10% y 12%.
“La idea viene un poco por el tema de seguir el impacto de los precios en la vida cotidiana, justamente porque la gente tiene una idea muy metida en la cabeza: que Costa Rica está muy caro. Mi objetivo era verificar eso”, explicó a Diario Extra.
El ejercicio no tiene validez científica, pues no lo hizo con todas las marcas ni en diferentes comercios, “pero no deja de mostrarnos el impacto de algunos productos en el bolsillo de los ticos”, aseveró.
Afectación a los más humildes
Adelfang destacó que la compra de los alimentos tiene un peso proporcional mayor en las familias de menos ingresos y que muchas veces, junto con el alquiler de la vivienda y el pago de los servicios públicos, les representa el grueso del presupuesto mensual.
El experto señaló los casos particulares del arroz y los lácteos, que han tenido fuertes disminuciones en los impuestos para entrar al país, pero a pesar de eso muestran aumentos importantes de costos. “Si bien lo del tomate y la papa fue lo más impactante en términos de subida de precios, lo que más me llamó la atención fue lo de la mantequilla, pero bueno, si uno da seguimiento a los lácteos, ve que incrementaron mucho en los últimos años”, comentó.
Durante 2022, 2023 y 2024 se redujo el impuesto de ingreso para los lácteos provenientes de Estados Unidos en un 19,8% (6,6% cada año) y en estos momentos no pagan ningún arancel.
La Ruta del Arroz del Poder Ejecutivo disminuyó los aranceles del grano de 35% a 4%, para el que viene sin cáscara, y a 3,5% para el que sí la tiene.
El economista aseguró que continuará desarrollando estos ejercicios con el fin de dar seguimiento a las variaciones del costo final de los productos.