“Es algo que jamás imaginamos que ocurriría”, así resumieron lo que para estos cuatro jóvenes será uno de los recuerdos más importantes de su vida, el día que el presidente de los Estados Unidos les pidió que posaran junto a él para una foto.
“Es algo que jamás imaginamos que ocurriría”, así resumieron lo que para estos cuatro jóvenes será uno de los recuerdos más importantes de su vida, el día que el presidente de los Estados Unidos les pidió que posaran junto a él para una foto.
Bryan Badilla, Génesis Soto, Katherine Fernández y John Junior, son los cuatro becarios que la Embajada de Estados Unidos patrocinó para que estudien un año en ese país, como premio a su esfuerzo dentro del sistema educativo de colegios científicos.
Según explicó el astronauta costarricense, Franklin Chang Díaz, la iniciativa de llevar a estos chicos hasta el avión presidencial, fue de la embajadora norteamericana Anne Andrew. A pesar que el protocolo indica que solo el cuerpo diplomático podía estar en este espacio.
Cuando Obama vio a estos jóvenes, se detuvo unos minutos para conversar con ellos y antes de retirarse les pidió que se tomaran la foto.
“Fue increíble hablar con él. Al inicio pensamos que iba a ser un hombre muy serio, pero se comportó como un amigo y hasta nos reímos juntos”, recordó Bryan Badilla.
Por su parte, Chang comentó que dentro de las cosas que se le dijeron al mandatario sobre estos estudiantes, fue que ellos eran un ejemplo del recurso más importante que tiene Costa Rica, su juventud.