Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) destacados en la delegación de Ciudad Neily trabajan para determinar si el móvil de la muerte de Edwin Abarca Blanco es el robo, con base en que dentro de la casa hallaron las habitaciones y demás aposentos muy desordenados.
Como lo informó DIARIO EXTRA en su edición del miércoles 15 de mayo, el hombre apareció maniatado dentro de la sala de su vivienda hasta que un familiar lo encontró, ya que varias llamadas a su celular sin éxito lo pusieron en alerta.
Cuando llegó y encontró a Abarca llamó de inmediato a las autoridades, que desde ese momento se mantienen investigando el homicidio.
Ahora necesitarán entrevistar a los familiares para determinar si alguna de las pertenencias de la víctima están dentro de la vivienda, por eso volvieron al lugar de los hechos.
Hasta el momento no se ha detenido a nadie como sospechoso del crimen, sin embargo las autoridades no bajan la guardia y se mantienen con las debidas investigaciones.
Pese a que funcionarios de la Fuerza Pública informaron que Abarca presentaba una herida de arma de fuego en la nuca, en el Complejo de Ciencias Forenses descartaron esta versión e informaron que no tenía lesiones visibles, por eso los agentes esperan lo que determine la autopsia.
Jorge Abarca, hermano del fallecido, asegura que la muerte de Edwin se debió a un robo, ya que dentro de la casa no encontraron un dinero. Además considera que los asesinos sabían de la solvencia económica de su hermano.
“Él era un muy buen hombre, todo lo que tenía se lo ganó con el sudor de su frente y con gran esfuerzo. Él tenía dos tiendas de abarrotes, fincas ganaderas, una mueblería y les hacía favores a todas las personas.
Me duele mucho lo que sucedió y quiero dejar la justicia en manos de Dios, sin embargo los responsables deben pagar por la muerte de mi hermano”, manifestó.
Edwin Abarca Blanco deja dos hijos mayores de edad y un nieto. Sus 8 hermanos ya le dieron sepultura.