El Poder Judicial dio a conocer este miércoles el V Informe del Estado de la Justicia, donde se señalan avances en diferentes áreas, y se reconocen la necesidad de procesos de mejora para la justicia nacional.
El informe destaca que entre 2021 y 2024, el número de casos activos disminuyó en un 17%, mientras que la productividad por juez aumentó en un 7,1%. Además, señala que el costo por resolución bajó un 11,5%.
“Son datos que muestran un rumbo positivo de este Poder de la República”, afirmó el magistrado presidente de la Corte Plena, Orlando Aguirre.
Mejoras
El informe menciona que en 2023 Costa Rica se ubicó entre los tres países de América Latina con mayor confianza ciudadana en su sistema judicial; y resalta que la alta demanda de servicios que reciben “refleja una ciudadanía que cree en esta institución”.
El estudio también menciona oportunidades de mejora.
“En ese aspecto quiero ser enfático: los cambios ya están en marcha. Se mencionan, por ejemplo, el rezago judicial y la duración de los procesos penales. En ambos frentes ya hay acciones en curso: En materia de rezago, en 2024 se resolvieron 579.894 expedientes, un 2,49 % más que el año anterior”, explicó Aguirre.
“Logramos reducir el número de casos pendientes en un 1,05 %, a pesar de que ingresaron casi 5.000 expedientes más que en 2023”, agregó el magistrado.
Recordó que en el ámbito penal, impulsan ante la Asamblea Legislativa una reforma al Código Procesal Penal que permitirá juicios más céleres, mejor uso de los recursos y menos trabas por conflictos de agenda de los abogados.
Ataques políticos
Aguirre señala además que el informe documenta ataques inéditos por parte de actores políticos que afectan al Poder Judicial y deterioran la calidad democrática.
Señala, además, que la agresividad discursiva aumenta cuando el Poder Judicial interviene en asuntos sensibles, como investigaciones penales o resoluciones de la Sala Constitucional.
“Lo anterior resulta inaceptable en un Estado de derecho y genera un perjuicio a la institucionalidad del país. Los ataques infundados, la polarización y la desinformación no son compatibles con una democracia como la nuestra y atentan contra la cultura de paz que caracteriza la sociedad costarricense”, mencionó Aguirre.