Durante la mañana de este viernes residentes de diversas comunidades del país se vieron sorprendidos por un fuerte olor a azufre que invadió el aire. Este fenómeno, es atribuido a la emanación de gases del volcán Poás, ubicado en Alajuela.
De acuerdo con Geoffroy Avard, vulcanólogo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de la Universidad Nacional (Ovsicori), la falta de viento durante la noche permitió que la pluma de gases se concentrara y se desplazara en múltiples direcciones, alcanzando zonas usualmente no afectadas.
Avard explicó que la presencia persistente del olor a azufre dependerá no solo de las condiciones climáticas, sino también de la actividad de emisión de gases del volcán Poás.
Otro fenómeno atmosférico observado fue una nube baja que dificultaba la visibilidad del paisaje, provocada por la suspensión de partículas como polvo y ceniza en la atmósfera.
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) señaló que factores como la disminución de humedad, la baja velocidad del viento y los gases del volcán Poás contribuyen a la formación de la calima.
Avard destacó que este volcán presenta una actividad sísmica muy alta, con una tendencia al aumento en la energía, lo que genera preocupación entre los residentes de la zona y las autoridades pertinentes.
Ante esto, las autoridades instan a la población a mantenerse informada sobre la evolución de la situación y seguir las recomendaciones de seguridad emitidas por los organismos competentes.