Cámaras empresariales enfocadas en el turismo y el sector agroalimentario solicitaron la posibilidad de replantear el Fondo de Avales y Garantías.
La Cámara Nacional de Turismo (Canatur) y la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria (CNAA) comparecieron en la Comisión de Asuntos Hacendarios para referirse a la propuesta que busca cambiar el destino de $300 millones dados a Costa Rica por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
La intención es la de financiar la operación del Fondo Nacional de Avales y Garantías con el propósito de generar condiciones para el acceso a crédito en las empresas afectadas como producto de la pandemia por Covid-19.
JUSTIFICACIONES
Ruben Acón, presidente de Canatur, indicó que estaría de acuerdo con que se archive el proyecto de Ley 23.253 y se reforme el artículo que se refiere a la cobertura del aval de la Ley 10.106 para volver al espíritu original de la iniciativa.
“Que se establezca que los avales por otorgar por el Fondo Nacional de Avales cubran solo los nuevos créditos otorgados por entidades financieras supervisadas por la Sugef. O sea que, para operaciones crediticias ya constituidas, el aval pueda ser utilizado para complementar la garantía con que cuentan estas operaciones. Ni en este caso ni en los créditos nuevos podrá el aval ser empleado para sustitución de la garantía por parte del deudor. De esta manera se garantiza que el Fondo Nacional de Avales se destine exclusivamente para los beneficiados que la ley busca proteger y ayudar”, externó Acón.
PYMES
Randy Gordon, presidente de la Federación de Cámaras del Caribe y vicepresidente de Canatur, sostuvo su comentario en la línea del jerarca de la cámara turística.
“Limón tiene 6.000 empresas, según un informe del MEIC del Estado de las Pymes, versus las 52.000 en la GAM, mientras que en Puntarenas cerca de 10.000. ¿Cuál es la situación de la empresa? Lo dijimos desde Canatur que si no se aprueba una ayuda económica vía financiera habría un cementerio empresarial. Desde la Cámara hemos hecho actividades para convocar empresarios a capacitaciones, llegan a notificarles y ya no está la empresa”, lamentó.
Gordon subrayó que el fondo es necesario, pero se requiere establecer alternativas porque no se puede dejar desamparadas a las pequeñas y medianas empresas.
AGRO
Álvaro Sáenz, vicepresidente de la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria, expuso que las garantías para los afectados en pandemia aún son necesarias.
Sáenz apuntó que se torna urgente proceder a la facilitación de crédito para que empresas sigan manteniéndose o reactivando sus actividades productivas.
Sostuvo que el sector atraviesa por una crisis inmensa y que existe una recesión del 4% negativo para el año en curso. Enfatizó que el motor de la economía estuvo detenido y disparó los problemas de desigualdad existentes.
También, las afectaciones son aún mayores cuando surgen problemáticas como la crisis de contenedores, la guerra en Ucrania con el encarecimiento de los insumos y la posible amenaza por el ingreso a la Alianza del Pacífico.