Lima. (AFP) – La presidenta de Perú, Dina Boluarte, decretó el miércoles el estado de emergencia en sus fronteras y ordenó el envío de militares para reforzar los controles ante la llegada de cientos de migrantes, que en su mayoría provienen de Chile.
Las tropas apoyarán la vigilancia en los cruces limítrofes con Chile, Bolivia, Brasil, Ecuador y Colombia.
“La policía nacional mantendrá el control del orden interno con apoyo de las fuerzas armadas”, enfatizó Boluarte en conferencia de prensa junto a varios ministros.
En principio el estado de emergencia empezará a regir desde este jueves. Sin embargo, el ejecutivo no ha precisado su duración ni si se restringirán derechos en los puntos fronterizos.
Apoyándose en informes de prensa que señalan que “quienes cometen a diario asaltos, robos y demás actos delincuenciales son extranjeros”, Boluarte alegó que su decisión está encaminada a combatir la inseguridad.
“Por eso tenemos (que) hablar casi al unísono de migraciones con inseguridad ciudadana”, expresó.
En ese sentido, su ministro de Defensa, Jorge Chávez, sostuvo que el estado de emergencia tiene como “finalidad” evitar “el ingreso de manera irregular e ilegal” de personas.
Bajo el sol y el frío desérticos, cientos de migrantes que salieron de Chile se aglomeran desde hace semanas en el paso fronterizo entre la ciudad peruana de Tacna y la chilena de Arica, donde las autoridades peruanas les impiden el paso por falta de un pasaporte sellado y visa vigente.
Mujeres, hombres y niños están atrapados entre policías chilenos y peruanos que vigilan el punto limítrofe, 1.500 km al sur de Lima.