Desde pequeño el sueño de Luis Ricardo Morales Quesada era pintar, la pasión la desarrolló principalmente por los dibujos de libros de colorear, pero la figura humana marcó sobre todo su camino.
El creciente interés en aprender técnicas e historias de las artes hizo que cursara estudios en la Universidad de Costa Rica y lograra convertirse en un profesional de las artes plásticas con énfasis en pintura.
“La mayoría de las personas que nos dedicamos a las artes nacemos con la pasión y el gusto por la pintura, escultura o alguna de las diferentes ramas de las Bellas Artes que existen”, expresó Morales.
Hoy, este artista consolidado, se dedica al cuadro de bastidor, camisetas pintadas así como a la escultura en cerámica y arcilla. Conozcamos un poco la vida de este gran artista nacional.
¿La base de vida de un artista?
-Un artista se basa en crear, en el placer que genera el trabajo. Hay ganancias que vienen por añadidura con lo que uno hace, pero para mí no es lo esencial, sino disfrutar lo que hago día tras día. Me expreso a mí mismo, lo que siento y la visión de un mundo muy personal.
¿En qué se diferencia la obra de Luis Morales?
-Trabajo a fondo la figura humana, me gusta plasmar el desnudo, parcial o completo, pero más que todo a un estilo más kitsch de crítica hacia las normas sociales establecidas y con expresión. Otra diferencia es que me baso en una perspectiva post moderna, pero siempre manteniendo lo figurativo, tal vez por eso me diferencio de artistas actuales nacionales porque ahora está en boga el arte más extracto, más gestual, más expresivo, más libre, no tan amarrado a las normas de proporción y balance.
¿Cuáles artistas influyeron en su concepción de arte?
-Siempre admiré a Miguel Ángel, tanto en pintura como escultura; la forma en la que moldeó los cuerpos siempre me fascinó. También la visión de Salvador Dalí, ambos como artistas más modernos. De igual modo a Pablo Picasso en sus inicios, entre otros.
¿Qué papel juega la familia en su formación como escultor?
-¡Apoyo total! Mis padres y hermanos siempre me respaldan incondicionalmente en todo lo que hago. Saben que ser artista es muy difícil, es un sacrificio muy grande ya que existe un mercado limitado; creamos opciones de arte y no a todo el mundo le gusta.
Mis abuelos siempre tuvieron la visión de que iba llegar a ser grande.
¿Es difícil posicionarse en el mercado para un artista nacional?
-Depende del tipo de arte y las expectativas que uno tenga. En la parte comercial nos podemos colocar muy bien, pero si queremos laborar en un área de expresión personal, el mercado se limita a un grupo de personas que entienden y les gusta esa forma de pintar. Tal vez está dentro de lo que está en boga, pasado de moda o está muy a futuro. Depende de la visión de cada quien, entonces puede ser un poco complicado; pero igual hay muchas opciones de trabajar en las ramas de las artes.
¿Cuáles son los productos que ofrece en general?
-Mi producto es la pintura de bastidor en diferentes técnicas como acrílico y óleo; principalmente escultura en arcilla de cualquier dimensión, bustos a tamaños realistas por ejemplo. Ofrezco también camisas pintadas a mano con diferentes diseños; esas son mis opciones de arte actualmente. Son Trabajos 100% originales, no como copista y le garantizo una obra de calidad con buen acabado y con lo que el cliente espera.
¿Los precios son aptos para todas las personas?
-Hay accesibilidad para todo tipo de clientes. Los precios varían, pero lo más importante es que una persona valore el arte, quiera algo y lo entienda, esa es mi mayor satisfacción, entendiendo que hay gustos para todo.
Cumpliendo metas, forjando sueños, es el ejemplo del artista nacional Luis Ricardo Morales Quesada, donde una pasión se convirtió en profesión y estilo de vida.
Si está interesado en adquirir alguna de las obras de Morales, puede llamar al 2282 7001 o al 8397 8122.