El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) confirmó a DIARIO EXTRA que el escenario que contemplan para esta campaña electoral es que los partidos políticos deberán jugársela sin los tradicionales bonos de deuda política. Según explicó el vocero del TSE, Diego Brenes, es predecible que la Sala Constitucional no se pronuncie a tiempo ante la medida cautelar que tiene frenado el mecanismo de financiamiento.
El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) confirmó a DIARIO EXTRA que el escenario que contemplan para esta campaña electoral es que los partidos políticos deberán jugársela sin los tradicionales bonos de deuda política. Según explicó el vocero del TSE, Diego Brenes, es predecible que la Sala Constitucional no se pronuncie a tiempo ante la medida cautelar que tiene frenado el mecanismo de financiamiento.
“Como las acciones de inconstitucionalidad normalmente llevan mucho tiempo uno estimaría que por las fechas en las que estamos los certificados de cesión ya no se van a poder emitir”, señaló Brenes.
Señaló que sería la primera campaña desde los años setenta que se ejecutaría sin este recurso con el que los candidatos presidenciales están acostumbrados a agenciar plata para sus campañas.
Así las cosas, proyectan que deberán echar mano a otros mecanismos como las donaciones privadas, en específico de personas físicas y nacionales que respondan a dinero o inmuebles.
NO A LOS BONOS
La acción de inconstitucionalidad contra los bonos de deuda política fue presentada en mayo de este año, alegando que violentaba los artículos: 1, 9 y 45 de la Constitución Política.
El TSE coincide con la inconstitucionalidad de estos, y ha recomendado eliminar el mecanismo.
Según Brenes el problema no son los bonos en sí mismos sino que han abierto un portillo para que extranjeros los compren, y generan inequidad pues los bancos colocan los certificados de los partidos que mejor estén posicionados en las encuestas.
FINANCIAMIENTO
Para resolver el vacío que dejarán los bonos, Brenes apunta al proyecto de ley de reformas electorales que ha propuesto el TSE en el que se propone aumentar de un 15 % a un 50% el dinero que se les entrega por adelantado a los partidos. Así como el establecimiento de transporte gratuito a cargo de concesionarios y franjas electorales en radio y televisión.
El TSE fondeará a los partidos con ¢36.295 millones, es decir el 0,19% del PIB, menos el porcentaje destinado para las elecciones municipales del 2016.