Los vecinos de Cartago pidieron mano dura contra aquellos establecimientos que en su menú de actividades ofrecen noches de karaoke.
Rolando Rodríguez, alcalde del cantón central, explicó que por sus características muchos de estos inmuebles no son aptos para realizar este tipo de eventos.
Muchas de las estructuras son de madera, lo que permite que el ruido salga y moleste a quienes viven en los alrededores de estos bares o restaurantes.
“Este reglamento no es nuevo, simplemente es que a alguien que quería hacerlo por la libre no le gustó tener que pedir permiso municipal para este fin”, comentó.
La normativa vigente obliga a los dueños de establecimientos a solicitar un permiso especial cada vez que quieran efectuar este tipo de eventos, lo cual se convierte en un tema engorroso para ellos por la tramitología que representa estar yendo y viniendo todas las semanas a la Municipalidad.
Rodríguez comentó que aunque el reglamento dice que debe ser un permiso por cada vez que se quiere realizar una noche de karaoke, si se trata de algo permanente un día fijo a la semana, la Municipalidad podría ser flexible y otorgar la autorización para el mes completo.
“Nosotros no queremos afectar a los empresarios, solo que debemos regular una actividad que a todas luces molesta a muchas personas.
El reglamento básicamente lo que habla es del nivel de decibeles permitido para que no dañen la salud pública, que no definimos nosotros sino que ya se encuentra regulado por el Ministerio de Salud”, agregó.
En el caso de de las fiestas que se llevan a cabo en las casas, por no ser locales comerciales la Municipalidad no puede poner ningún tipo de restricciones.
No obstante, la regulación dice que no se puede escuchar música ni hacer ruidos después de las 10 p.m. porque se alteraría el orden público. De manera que de registrarse algún tipo de anomalía, sería la Fuerza Pública quien intervendría.