Falta de personal condiciona cuidados en Hospital de San Carlos
Los pacientes del Hospital de San Carlos denuncian que deben esperar horas y hasta días para ser atendidos en el centro médico debido a la falta de personal que enfrenta el centro médico.
Según comentaron los asegurados a Diario Extra, existen casos en que los usuarios esperan hasta cuatro días en un espacio llamado “sillones” a que los puedan intervenir quirúrgicamente luego de un accidente.
“Mi primo tuvo un pequeño incidente, le tuvieron que amputar parte del empeine del pie, él llego y estuvo tres o cuatro días con tratamiento para bajarle el dolor, pero como no había campo estuvo en un campo llamado ‘sillones’, hasta que ya se desocupó una camilla y un día después lo operaron.
Ahí, en ese espacio, esperan los pacientes que los tienen que internar, el centro médico tiene buen equipo, pero no hacen nada con tener toda esa capacidad si no se puede aprovechar en la gente que de verdad la ocupa”, mencionó Alexander Ramírez, vecino de Aguas Zarcas.
Otro de los casos conocido fue el de una adulta mayor que, según contó su hija, sufrió un derrame cerebral mientras estaba en su hogar y luego de ser llevada hasta el centro médico de urgencia pasó más de dos horas esperando por una camilla para que la atendieran.
Falta de personal
Esta situación, que afecta a los cerca de 500.000 asegurados de la Zona Norte adscritos a este centro médico, se da principalmente por la falta de personal médico, pues los funcionarios actuales deben trabajar horas extra pese al agotamiento físico.
En número reales, el personal hospitalario indica que laboran con apenas seis enfermeros y 11 auxiliares, los cuales tienen que atender en promedio a 105 pacientes.
“Dígame; ¿quién se quiere quedar haciendo una extra en una sala de shock donde recibe ocho pacientes críticos y seis estables? Nadie, es imposible querer quedarse ahí.”, compartió María Arce, funcionaria del servicio de Emergencias del centro médico.
La Fundación Grítalo, una oenegé que, aun cuando su propósito es ayudar familias en vulnerabilidad, las circunstancias les hicieron aplicar políticas para no dejar a la deriva los usuarios del centro médico norteño.
“Tenemos proyectos SOS donde compartimos una merienda con las personas que esperan, para que al menos puedan comer ellos con sus familias mientras los atienden”, mencionó María Fernanda Acuña, representante de dicha organización .
