Los vecinos de San Roque en Liberia, Guanacaste, se llevaron tremendo susto cuando al salir de sus casas encontraron tendido en el piso a un hombre y junto a él había un perro llamado Coco.
De inmediato dieron aviso a las autoridades, pues muchos pensaron que se trataba de una persona pasada de tragos.
Sin embargo, tras la llegada de la policía se dio parte a la Cruz Roja porque vieron que el sujeto estaba herido en el cuello y la espalda.
Minutos más tarde los paramédicos arribaron a la escena y tras revisar al lugareño lo declararon fallecido.
Mientras se aplicaba la atención médica los liberianos comentaron a las autoridades que en horas de la madrugada escucharon varias detonaciones por arma de fuego, pero no fue hasta tres horas después que ubicaron el cadáver.
El suceso se registró a 150 metros de un supermercado del barrio San Roque.
De acuerdo con el reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el occiso fue identificado como Ronald Salgado Dávila, de 44 años y quien vivía en barrio Moracia, Liberia.
La policía judicial indaga las causas del ataque contra el pampero, así como las personas involucradas, pues de momento no cuentan con mayores detalles sobre el hecho de sangre.
EN ACERA
Los vecinos hallaron el cuerpo de Salgado tendido en la acera, pero fueron los policías quienes notaron los orificios de bala.
“Nos solicitan colaboración a una actividad sospechosa en Liberia, se despacha del Comité Auxiliar de Liberia la unidad al lugar, al llegar a la escena se ubica un masculino, el mismo sin signos de vida, en apariencia, con impactos de bala en el cuerpo. Se encontraba en vía pública, en la acera”, explicó Juan Félix Matarrita Gutiérrez, de la Cruz Roja de Liberia.
A Ronald Salgado lo conocían en la zona como “La Blanca” y algunas personas mencionaron que era un habitual consumidor de drogas.
Incluso, con protección de su identidad, lamentaron que en el barrio San Roque se esté presentando la venta de estupefacientes, ya que aseguran se sienten inseguros en la comunidad.
Salgado era hijo de una reconocida profesora de Liberia, según describieron varios pamperos es una familia trabajadora y muy querida en Moracia.
En apariencia, el hombre tenía poco tiempo de haber salido de un centro penal.