Managua, (dpa) – El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, reformó el reglamento de la Ley de Seguridad Social tras firmar un decreto que restituye la figura de la pensión mínima para miles de ancianos que no cumplen los requisitos de ley para tener derecho al retiro laboral.
Ortega firmó el decreto presidencial durante el multitudinario acto central de conmemoración del 34 aniversario del triunfo de la revolución sandinista, realizado la noche del viernes en la Plaza Juan Pablo II, en el costado norte de la ciudad capital.
El pasado 20 de junio, cientos de ancianos miembros de la Unión Nacional de Adultos Mayores (UNAM) que realizó diversas movilizaciones de protesta en demanda de la pensión mínima, fueron reprimidos por fuerzas especiales de la Policía Nacional que los desalojó del edificio del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) que ocuparon para llamar la atención sobre su demanda.
Los ancianos de la UNAM demandaban la vigencia de la pensión mínima desde el año 2007, con el ascenso presidencial de Daniel Ortega, a quien reclamaban restituir dicho derecho que les fue cercenado en 1994, durante el gobierno conservador de Violeta Barrios de Chamorro.
La ley de la Seguridad Social de Nicaragua, establece que un trabajador requiere cotizar durante 15 años de labores un total de 750 semanas para tener derecho a la jubilación al cumplir 60 años de edad.
El decreto aprobado anoche por Ortega permitirá a unos 40.000 ancianos de todo el país tener derecho a una pensión mínimas que, según el número de cotizaciones podrán oscilar entre los 60 y los 120 dólares aproximadamente.