Caracas. (EFE) – Miles de opositores se volvieron a manifestar en el este de Caracas, en medio de expresiones tanto del Gobierno como de los adversarios al presidente Nicolás Maduro de rechazo a la violencia que en las últimas jornadas se degeneró hacia actos de vandalismo.
Con la presencia de María Corina Machado y el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, y sin los líderes universitarios que encabezaron las marchas desde el miércoles, una gran cantidad de venezolanos salieron a la calle para clamar por paz y en apoyo del dirigente Leopoldo López.
Tras días de manifestaciones, el ministro del Interior, Miguel Rodríguez Torres, indicó que de las 120 personas que fueron arrestadas por incidentes en todo el país quedan 14 detenidos.
Según señaló, los que aún quedan están procesados por el incendio de vehículos de Policía, la agresión a funcionarios y el porte de armas de fuego en el movimiento que acabó con tres muertos y decenas de heridos.
El gobierno acusa a López de instigar esos enfrentamientos y en este momento el dirigente tiene una orden de captura en su contra.
El partido Voluntad Popular, del político señalado, indicó paralelamente que efectivos de la Dirección General Sectorial de Contra Inteligencia Militar y la Guardia Nacional Bolivariana allanaron el domicilio del dirigente.
López es solicitado por delitos de homicidio intencional, terrorismo, lesiones graves, incendio a edificio público y daños a la propiedad pública.
El presidente, Nicolás Maduro, aseguró que Venezuela es víctima de la violencia de \”bandas fascistas\” que atacaron daños en comercios y organismos públicos en el este de Caracas, y se produjeran nuevos ataques al canal del estado VTV. El presidente venezolano dijo a través de Twitter que \”Venezuela tiene el derecho y el deber de defenderse al margen de la ley\” y afirmó que se derrotarán a todos estos grupos.