Nueva York. (EFE) – La ONU está discutiendo la posibilidad de asumir algún tipo de papel en los esfuerzos para mediar y poner fin a la crisis que se vive en Nicaragua, aseguró el portavoz Farhan Haq.
Según explicó a los periodistas, la Secretaría General de Naciones Unidas está manteniendo conversaciones con ese fin, incluidos contactos con la representación de Nicaragua ante la organización.
“Estamos discutiendo la cuestión y viendo qué podemos hacer que sea de ayuda”, externó Haq durante su conferencia de prensa diaria.
El portavoz explicó que, mientras esas conversaciones no se completen, no puede dar detalles sobre qué tipo de papel podría asumir la ONU.
El pasado 19 de julio, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, recibió al canciller nicaragüense, Denis Moncada, para analizar la crisis que vive el país.
Hasta ahora, Guterres ha centrado sus mensajes en denunciar la violencia y respaldar la mediación de los obispos nicaragüenses para buscar una salida pacífica.
En las últimas semanas, algunas organizaciones no gubernamentales y exdirigentes políticos han pedido al jefe de la ONU que intervenga para tratar de poner fin a la crisis que se inició el pasado 18 de abril con protestas contra el presidente, Daniel Ortega, y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Entre 295 y 448 personas han muerto en el marco de esas protestas, según organizaciones humanitarias, que hablan también de miles de heridos y de más de un millar de secuestrados o desaparecidos.
PERIODISTAS PIDEN RESPETO
Una treintena de periodistas protestó en Managua exigiendo que se respete su libertad de prensa y expresión, y en respaldo y solidaridad con todos los profesionales que han sido agredidos en más de tres meses de protestas contra el Gobierno que han dejado varios centenares de muertos.
“La libertad de prensa es un derecho del ciudadano y el derecho nuestro de hacer el trabajo y no está en juego y no vamos a renunciar a esto”, aseveró el periodista Luis Galeano durante la manifestación realizada en la rotonda “El Periodista”, en el oeste de la capital.
Galeano, apuntó que se mantiene “una campaña sucia” y de desprestigio contra los periodistas nicaragüenses que no son afines o no trabajan en medios del Gobierno, para tratar de “reducirnos”, “sentir vergüenza” e “intimidar a nuestras familias”, sin embargo, señaló que seguirán haciendo el trabajo como profesionales.
La agresión más reciente al gremio periodístico fue el secuestro del corresponsal de Canal 10 de televisión local, Roberto Collado, mientras daba cobertura este domingo a una marcha a favor de los obispos en la ciudad de Granada, ubicada 42 kilómetros al sureste de Managua.
ELECCIONES ANTICIPADAS
La Casa Blanca exigió “unas elecciones justas, libres y transparentes” para la restauración de la democracia en Nicaragua, y abrió la puerta a más sanciones a funcionarios del Gobierno del presidente Daniel Ortega si no detiene la “indiscriminada” violencia, que ha dejado ya más de 350 muertos.
“Unas elecciones libres, justas y transparentes son el único camino hacia la restauración de la democracia en Nicaragua”, afirmó la Casa Blanca en un comunicado sobre la crisis política en el país centroamericano.
En concreto, el Ejecutivo del presidente estadounidense, Donald Trump, responsabiliza a Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, de la “violencia indiscriminada” y la “brutalidad policial” contra los manifestantes que piden “reformas democráticas”.
Hasta ahora, Estados Unidos ha impuestos sanciones contra tres altos cargos nicaragüenses: Francisco Díaz, jefe de la Policía de Nicaragua, y consuegro del presidente nicaragüense; Francisco López, vicepresidente de la petrolera Albanisa; y Fidel Moreno Briones, secretario general de la alcaldía de Managua.
“Estas son el principio, no el final, de sanciones potenciales”, remarcó la Casa Blanca.