Controlar las computadoras con los movimientos de la mano dejará de ser un sueño de los amantes de la ciencia ficción y podría convertirse en la realidad de cientos de usuarios alrededor del mundo gracias a un nuevo acuerdo entre Hewlett-Packard y una joven empresa de San Francisco.
El gigante informático, HP, se alió con Leap Motion, una empresa con tres años de historia y menos de 100 empleados, que fabrica sensores del tamaño de un paquete de chicles y asegura que con ellos se pueden registrar movimientos de cada uno de los 10 dedos de la mano con una precisión de una centésima parte de centímetro.
Según los creadores, estos sensores se pueden conectar a cualquier computadora y permiten el uso de aplicaciones o software diseñado para funcionar con la detección de movimientos.
\”Los consumidores quieren pasar al siguiente nivel al interactuar y crear contenido digital\”, dijo el martes Ron Coughlin, vicepresidente senior de HP a cargo de las computadoras de consumo, a través de un comunicado. \”La tecnología de control 3-D de Leap Motion, combinada con la tecnología de HP y los grandes desarrolladores de aplicaciones, crearán una experiencia increíble para los usuario\”, agregó.
Andy Miller, el jefe de operaciones de Leap Motion y antiguo directivo de Apple, dijo que la tecnología de detección del movimiento podría tener tanto un uso recreativo para juegos como una aplicación para herramientas prácticas en los negocios profesionales.
Con el objetivo de dar salida a su producto, Leap Motion ha invitado a otros desarrolladores a que realicen aplicaciones similares a las de la App Store de Apple. Hasta ahora, 50.000 desarrolladores han presentado aplicaciones en este nicho que usa los gestos para crear modelos 3-D, simular instrumentos musicales o incluso manipular robots quirúrgicos.
Miller espera que el acuerdo con HP pueda abrir el camino hacia el control gestual en la informática de consumo del día a día.
Incluso si es introducida sólo en un limitado número de modelos, la nueva tecnología podría convertirse en la tabla de salvación de HP, que está luchando para contener la caída de ventas de laptops a medida que los teléfonos inteligentes y las tabletas han consumido gran parte del mercado.