Parece que a los cacos ya se les está haciendo costumbre robar en iglesias católicas, pues los casos siguen surgiendo conforme pasan los días. La última víctima fue el templo de San Luis de Santo Domingo, Heredia.
A ese lugar un grupo de 8 hampones ingresó con armas de fuego y tras amarrar y amordazar a tres oficiales de seguridad privada hicieron de las suyas tras forzar las puertas.
Según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los maleantes llegaron en varios vehículos y sacaron del lugar equipo de sonido, video, computadoras de escritorio, monitores y aires acondicionados que se instalarían en la iglesia. Debido a que son equipos nuevos y de alta factura están valorados en aproximadamente ¢75 millones. Pese al mal rato que hicieron pasar no solo a las cabezas del templo y feligreses, los agentes de la sección de Robos y Hurtos del OIJ realizaron una ardua labor para dar con los sustraído. Tras el trabajo de investigación y gracias a información confidencial recibida llegaron hasta un edificio de apartamentos en López Mateos de San Sebastián, San José.
Con el permiso de la dueña los judiciales ingresaron al aposento número 1, donde dieron con todo lo que robaron los delincuentes para decomisarlo y posteriormente entregarlo a la iglesia. Pese a que no había nadie en el apartamento, la policía no descartada detenciones en los próximos días, pues ya tendría fichados a los sospechosos de cometer el atraco.