Washington, (EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama, cumple hoy 100 días de su segundo mandato con avances sobre la reforma migratoria, muchos obstáculos en su lucha por un mayor control de las armas y la atención hacia el exterior puesta en Siria.
Obama comenzó formalmente su segundo mandato el pasado 20 de enero, aunque la ceremonia pública de investidura fue un día después, y su índice de aprobación ronda actualmente el 49 %, según un promedio de los últimos sondeos.
En estos primeros 100 días de los que serán sus últimos cuatro años en la Casa Blanca el presidente ha conseguido que el Congreso comience a debatir un proyecto de ley para una reforma migratoria, pero esos mismos legisladores han dado la espalda a sus esfuerzos por impulsar normas más restrictivas sobre la posesión de armas.
El Senado estudia actualmente un proyecto de ley de reforma migratoria negociado entre un grupo de ocho senadores demócratas y republicanos.
Obama apoya ese plan, que estipula un plazo de 10 años para la legalización de la situación de los indocumentados, dedica 3.000 millones de dólares a la seguridad fronteriza y sanciona a empresas que contraten a sabiendas a personas \”sin papeles\”, entre otros aspectos.
La semana pasada, durante la inauguración en Dallas de la biblioteca sobre el legado del expresidente George W. Bush, Obama reiteró que espera que este año se apruebe la reforma migratoria, una de las promesas incumplidas de su primera campaña electoral en 2008.
Con un Congreso muy dividido y la Cámara de Representantes en manos republicanas Obama no ha logrado que avance el debate sobre el control de las armas de fuego, una lucha en la que se implicó personalmente a raíz de la masacre en diciembre en una escuela de Newtown, donde murieron 20 niños y 6 adultos.Por otro lado, los desacuerdos entre Obama y el Congreso sobre cómo reducir el alto déficit público derivaron en recortes automáticos por valor de 85.000 millones de dólares al presupuesto federal que entraron en vigor automáticamente el pasado 1 de marzo.
Obama presentó en abril su presupuesto para el año fiscal 2014, que tiende una mano a los republicanos con la inclusión de reformas para reducir el costo de programas sociales y pone en la mira a los millonarios para lograr nuevos ingresos con más impuestos.
Su oferta no gustó a los republicanos, que adelantaron que no van a aceptar que los recortes de gasto estén condicionados a aumentos impositivos para los más ricos, pero tampoco a los demócratas más progresistas, descontentos con que haya reducciones a la Seguridad Social y al programa de salud para ancianos y jubilados Medicare.
En política exterior la situación estuvo dominada recientemente por las amenazas nucleares de Corea del Norte, pero en los últimos días la atención ha girado de nuevo hacia Siria.Con la vista puesta en profundizar la relación con Asia, como él mismo ha dicho en varias ocasiones, Obama visitará esta semana México y Costa Rica en el que será el primer viaje de su segundo mandato a Latinoamérica.