Por 10 años apareció en la pantalla chica como periodista, pero el deseo de dedicar más tiempo al servicio de Dios lo obligó a dar un giro a su carrera y dedicarse completamente a su faceta de predicador y cantante cristiano.
Fabricio Alvarado es el sucesor del diputado cristiano Carlos Avendaño, del partido Restauración Nacional.
Alvarado es oriundo de Desamparados, tiene 39 años y está convencido de que no hay prohibición para que un cristiano se adentre en la política.
Para él los “cristianos también son abogados, periodistas y tienen ideas que desarrollar”. Eso sí, fue claro al decir que “yo no voy a ir allá a panderetear, pero sí a defender principios, no solamente que son religiosos sino principios morales, valores”.
“VOY A SEGUIR PREDICANDO”
Aunque afirma que no lo hará dentro del Congreso, sí está claro que va a seguir predicando y cantándole a Cristo porque más que un pasatiempo, según resalta, es su modo de vida.
Para el comunicador la política se cruzó en su vida tras acercarse a Restauración Nacional como colaborador, justamente en el área de medios, no en la parte religiosa, pero su trabajo lo hizo ganarse la confianza de los militantes, quienes postularon su candidatura, la cual confiesa lo tomó por sorpresa.
Para él ahora representa a una agrupación “política no religiosa, compuesta por gente que pertenece en su mayoría a una denominación evangélica, aunque también han participado católicos”.
NO AL ABORTO
El diputado electo afirma que mantendrá la línea del partido en contra del aborto y el matrimonio gay, eso sí, en el margen del respeto porque “no vamos a ir a pelear con nadie”.
Entre sus prioridades como diputado están fortalecer el plano social que tenga como efecto por ejemplo la reducción de la deserción escolar, la pobreza en el sector infantil y el combate a la trata de personas.
Alvarado asumirá la curul con el respaldo de su esposa, con quien tiene seis años de casado y espera su segundo hijo.