El seleccionador Luis Fernando Suárez sigue de gira por los clubes de nuestro país. Después de visitar Puntarenas, ayer estuvo en la Zona Norte y visitó el estadio Carlos Ugalde Álvarez, con el objetivo de ver el entrenamiento de la Asociación Deportiva San Carlos.
En conversación con la prensa local reveló, entre otros temas, que no se medirá si debe llamar a un veterano o a un jovencito, pues también piensa en el Mundial 2026, al estar firmado ya hasta la próxima cita balompédica.
¿Los jugadores que llamará para los próximos fogueos serán en un alto porcentaje los que irán al Mundial de Catar?
-La puerta está abierta para todos. Hoy no tengo pensada una lista definitiva. Se dará cuando se tenga que dar. Por ahora cada uno de los jugadores de Costa Rica que crea que pueda estar debe pelear en la cancha para mostrar sus condiciones.
¿Por qué visita San Carlos?
-Estaba por hacerlo. Hace tiempo debí haberlo hecho. Es que llegué en un momento donde se pensaba en una clasificación y donde hubo ciertas situaciones complicadas y había que hacerlo con velocidad. Es bueno conocer a los jugadores por medio de sus entrenadores.
¿Haber renovado su contrato le permite esto?
-Lo más importante es que no solo pienso en el mundial de Catar, que es lo primero, pero no lo único. También hay que pensar en lo que se va a proyectar hacia adelante, para cuando empecemos el nuevo proyecto que ya empezó. Uno no puede quitar una cosa de la otra. Al llevar 26 jugadores uno le puede dar minutos y experiencias a jugadores jóvenes para dentro de cuatro años. Es justo que lo hagamos. Esto es mirar a gente todavía más joven que nos pueden dar buenas posibilidades de crecimiento para los próximos 4 años.
¿En qué consisten estos acercamientos?
-Cuando entrené clubes le decía al seleccionador nacional que contara conmigo para lo que necesitara, como otro asistente técnico. Eso es lo que quiero de los entrenadores del fútbol costarricense, que como están en el día a día pueden dar un diagnóstico sobre qué jugadores están bien o que necesitan algo distinto. Que te llamen y te digan “ponele cuidado a este jugador que se va desarrollando bien”. Quiero una buena relación con todos para tener un buen material.
¿Qué le han dejado los jugadores sancarleños Jeffry Valverde, Carlos Martínez y Juan Luis Pérez?
-Lo hago, no por marcar una diferencia respecto a los demás, sino porque lo que me gusta es poner a los jugadores a competir en un sitio donde puedan hacerlo. Los que he llamado de San Carlos han respondido bastante bien y eso dice mucho de ellos y de su entrenador. Este equipo juega bien, me gusta la forma en que juegan. Lo más importante es que soy totalmente libre de tomar las decisiones que crea son las mejores y es mi manera de ser. Llamo al que crea que tiene buenas condiciones y no necesariamente debe ser muy joven para marcar diferencia. Así como se hizo con Jewison (Bennette) o Brandon (Aguilera) no hay temor de poner a alguien de 38 años como Bryan Ruiz. Me cautiva el buen juego y no la edad.
¿Le pone cuidado a la prensa?
-No debo, no puedo. Debo tomar mis decisiones junto a mi cuerpo técnico. De pronto se puede coincidir con un periodista, pero mi decisión no es para que el periodista esté tranquilo porque le llame a un jugador. Tengo mis asistentes técnicos como asesores.
¿Se siente bien en Costa Rica? ¿Nos puede contar más?
-Me encanta Costa Rica, es un país donde hay un aire de libertad y siento que la gente es propositiva y que tiene equidad en el trato con los demás. Por eso me siento bien, lo he sentido cuando salgo a la calle. No soy de estar escondiéndome. Camino por donde vivo, salgo a restaurantes comunes y corrientes y me siento bien porque me siento uno más dentro de todos. Uno no debe pensar que por tener 30, 40, 50 o 60 años no se deja de aprender. Esta año fue de continuo aprendizaje, del bueno, que me llevó a tomar decisiones drásticas y traumáticas. A veces se puede tener temor de tomarlas, pero se tomaron y las consecuencias fueron buenas. El hecho de ser más agresivo y ser más atrevido es una enseñanza grande.