DIARIO EXTRA consultó la opinión de los diputados de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico sobre una reforma a la Ley Penal Juvenil ante los recientes asesinatos de menores al parecer involucrados con el crimen organizado.
Gloria Navas, presidenta de dicho foro legislativo, que se encarga de velar por la legislación orientada a combatir este flagelo, manifestó que en este momento esa normativa no se debe reformar porque este es un estudio muy delicado.
“La Ley Penal Juvenil ha tenido muchísimos años de estudio para llegar a esta legislación que está en la actualidad. Al menor hay que tratarlo de una manera diferente y las penas que tenemos para los homicidios son muy elevadas. A los menores no les dan beneficios, ellos cumplen las penas”, explicó.
Mientras que Gilbert Jiménez, miembro de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico, señaló que trabajan en un proyecto de ley relacionado con la aplicación de la Ley contra la Delincuencia Organizada respecto a la Ley Penal Juvenil.
“Justamente porque el fenómeno de los sicarios jóvenes es un tema que no se puede apartar de ninguna manera de la aplicación de la Ley contra la Delincuencia Organizada, porque son partes de estructuras del crimen organizado y desde esa perspectiva también tenemos que valorar el tema del reclutamiento de las personas menores de edad.
También hay una transgresión al derecho de los menores de edad que están en estado de vulnerabilidad. Se debe recordar que muchos de estos muchachos no tienen oportunidades, no tienen acceso a servicios, por lo que son fácilmente reclutados por las bandas criminales”, declaró.
Por su parte, Alejandra Larios, otra diputada de ese panel legislativo, se refirió a la Ley Penal Juvenil y dijo que esperarían la propuesta, sin embargo, destacó que urge cerrar los portillos.
“Tenemos que cerrar todos los huecos que pueden existir para el crimen y planteado de esa manera me parece positivo. Debemos criminalizar lo que tengamos que criminalizar.
Desde la Asamblea Legislativa debemos apoyar los proyectos que beneficien esto, sin olvidar que desde la Asamblea Legislativa se determinan los procedimientos para perseguir los delitos”, recalcó.
MAGISTRADOS Y JUECES
El Periódico del Pueblo entrevistó a Patricia Vargas, magistrada de la Sala Tercera y coordinadora de la Comisión Penal Juvenil, quien subrayó que la ley en materia de psicotrópicos prevé un supuesto de agravamiento por la utilización de menores de edad.
“Este está referido exclusivamente al tema del narcotráfico, pero hoy por hoy con el tema de la delincuencia organizada claro que esto tiene un fenómeno mucho más amplio porque las organizaciones criminales son empresas de lo delictivo”, expresó.
En dicha entrevista también participó la jueza Elena Ulloa, coordinadora del Tribunal de Apelación Juvenil, quien dijo que en vez de pensar en cambiar la legislación se debería enfocar en fortalecer el eje de la familia, el Estado y la sociedad.
“Hay algo que no quisiera que se me olvide decir, que es el eje de la familia, el Estado y la sociedad. Si ustedes se ponen a ver Puntarenas, Limón y Cartago, pero sobre todo los puertos, donde se registra ese incremento notorio de la violencia, son las zonas históricamente más deprimidas desde el punto de vista social. Entonces, si hablamos del rezago educativo, también los padres de estos jóvenes fueron excluidos del sistema educativo, entonces para ellos el ejemplo que les pudieron haber dado es que la educación no era una alternativa”, explicó.
Vargas y Ulloa llegaron a la conclusión de que este problema radica en algo más que decir que la Ley Penal Juvenil no sirve para nada.
A su parecer, se debe llevar a cabo una reestructuración desde el aparato estatal para darles educación a los niños y evitar que caigan en las garras del crimen organizado.
La Comisión de Seguridad y Narcotráfico trabaja en un proyecto de ley relacionado con la aplicación de la Ley contra la Delincuencia Organizada respecto a la Ley Penal Juvenil.
OPINA
Patricia Vargas
Magistrada de la Sala Tercera
“Lo más feo de ver a un menor de edad sentado solo en un estrado es ver un niño sin sueños. Ese niño que debería estar soñando con ser astronauta, doctor o abogado pierde sus sueños por andar en malos pasos”.