Manuel Tovar, titular del Ministerio de Comercio Exterior (Comex), dijo que el país no está buscando un Tratado de Libre Comercio (TLC) bilateral Costa Rica-Japón.
“Estamos esperando negociar con el bloque del Acuerdo Transpacífico, donde está Japón”, comentó. En este grupo se encuentran economías importantes como Australia, Singapur, Malasia y Vietnam, entre otras.
“La aspiración es firme, vamos a ponerle el acelerador en materia de los acercamientos políticos del cabildeo. Nueva Zelanda asume la presidencia pro tempore del Acuerdo Transpacífico en enero y esperamos dialogar con ellos entrado el año para ver cuál será el esquema que hay que manejar”, destacó.
Tovar explicó que este bloque se rige por consenso. Eso significa que todos los países deben estar de acuerdo con el ingreso de Costa Rica en caso de que prosperaran las negociaciones.
“Hace poco el canciller (Arnoldo André) y yo estuvimos en Tokio, Japón, conocemos el músculo político y económico de este bloque y hemos recibido manifestaciones positivas del bloque. La pelota está del lado de ellos, nosotros estamos preparados técnica y políticamente”, manifestó.
Agregó: “No estamos pensando en un acuerdo bilateral con Japón, estuvimos reuniéndonos con las autoridades japonesas, pero en el esquema de Transpacífico. Esperamos tener un acercamiento político, para enero iniciaremos un cabildeo con Nueva Zelanda”.
El proceso de negociación del Acuerdo de Asociación Transpacífico tiene por objeto la creación de una plataforma para una integración económica y comercial en la región Asia-Pacífico.
La idea es sentar las bases para el crecimiento económico, el desarrollo y la generación de empleo de los países miembros.
En relación con la Alianza Pacífico, Tovar reconoció que la convulsa situación en Perú atrasará las negociaciones. “Puede que haya un impacto en los tiempos que esperamos incorporarnos”, señaló.
El gobierno pretende lograr un entendimiento con quienes se oponen a este acuerdo para que exista el mayor consenso posible. No obstante, hay sectores que insisten en ser excluidos, sobre todo los agrícolas, a pesar de conocer que este bloque no haría excepciones, más allá de las ya negociadas con los otros países miembros.