Estudiantes, maestros y personal administrativo de la Escuela José Joaquín Peralta Esquivel de El Guarco, Cartago, terminaron en el Hospital Max Peralta con síntomas de intoxicación luego de inhalar unos químicos.
Tres unidades de Bomberos y 3 de la Cruz Roja llegaron al centro educativo para trasladar a los afectados. Inicialmente los niños y el personal estaban en el recinto, cuando empezaron a sentir mareos y náuseas. Todos se asustaron, pues la gran parte de los afectados afirmaban percibir un olor pestilente.
Ante dicha situación, los bomberos arribaron para determinar de dónde venía ese olor, ya que su origen era desconocido.
Finalmente, concluyeron que provenía de una empresa que queda cerca de la escuela donde utilizan químicos para el tratamiento de material reciclable.
VECINOS PREOCUPADOS
Al igual que los estudiantes, algunos vecinos de la comunidad se vieron con afectaciones y tuvieron, incluso, que acudir al centro médico por los efectos de ese olor.
Una brumosa que vivió momentos de angustia por el químico fue doña Ana Cecilia Brenes, a quien le tocó ver a su nieta de 14 años sufrir las consecuencias.
“Yo estaba aquí acostada y de un momento a otro olí, les pregunté a los vecinos si alguno había dejado el gas encendido y todos me dijeron que no. Al rato mi nieta me dijo que se sentía mal, con dolor de garganta, en la nariz y que le enchilaban los ojos”, narró.
Minutos después de ese malestar vino lo peor para la joven, pues le empezó a costar respirar y terminó en valoración en el Max Peralta porque “la respiración la tenía baja”.
Doña Ana afirma que ella vomitó algo espumoso debido al efecto de lo que habían olido.
Algo similar sucedió con Vivian Camacho, ella y sus hijos vomitaron y sintieron los mismos síntomas.
QUÍMICOS
Los habitantes de El Guarco expresaron que en menos de 24 horas pasaron situaciones con químicos en dos empresas: UPL, dedicada a la elaboración de pesticidas agrícolas, y Wastec, que trabaja con productos para tratar el material reciclable.
Ambas quedan atrás de la escuela y provocaron el mal rato entre los lugareños.
Desde Bomberos informaron que UPL, un día antes de que se produjera el incidente en el centro educativo, tuvo un derrame de productos y debido a eso acudieron a valorar la escena. En el caso de Wastec, ellos no tuvieron ningún inconveniente de manipulación, sino que la compañía está trasladándose de sede y en el acomodamiento de los productos emanó el olor. Ese sería el causante de la situación escolar.
DIARIO EXTRA acudió a las empresas para saber si algún trabajador nos podía atender, no obstante, nos informaron que no era posible.
El Periódico del Pueblo se dirigió a la Municipalidad de El Guarco para consultar sobre las compañías y el trabajo que realizaban junto al Ministerio de Salud respecto a la situación.
Cristian Aragón, representante municipal, comentó que ambas empresas están con la documentación al día. “Ya les pedimos que las actividades que ellos realizaban y que podían poner en riesgo a la comunidad que las hicieran en otro momento. En el caso de la empresa que se queda en el sitio, nosotros (junto al Ministerio de Salud) tenemos que darle seguimiento para que no siga pasando esa situación”, aseguró. Al cierre de esta nota los menores y el personal del centro educativo se encontraban estables.
Ana Cecilia Brenes
Vecina
“Olía como a un veneno de roedores. A mi nieta se la llevaron al hospital, a ratos no era tanto el olor, sino el dolor en los ojos”.
Johnny Rojas
Bombero
“Llegamos al lugar y sí había un fuerte olor, realizamos la investigación y nos percatamos de que era una empresa que estaba trabajando con reciclaje y de ahí se desprendió el olor”.
Cristian Aragón
Municipalidad de El Guarco
“El Ministerio de Salud nos acompañó para verificar que todo estuviera bien. Estamos a la espera del encargado que va a llevar a cabo el proceso a lo interno (de la empresa del derrame)”.
Vivian Camacho
Vecina
“Nosotros lo que hemos sentido es dolor de cabeza, de garganta, como una carraspera. Incluso mi hijo me dijo que todo le sabe como a metal”.