Managua. (EFE) – El Gobierno de Nicaragua reportó otro muerto en el marco de las protestas contra el Gobierno del presidente Daniel Ortega que comenzaron el pasado 18 de abril.
El fallecido fue identificado como Dariel Steven Gutiérrez Ríos, nieto de una antigua vicealcaldesa del municipio de Jalapa (norte), dijo la vicepresidenta y primera dama del país, Rosario Murillo, a través de medios oficiales.
“Venía a Managua y fue agredido en el tranque (bloqueo de vía) de la muerte en La Trinidad”, municipio del departamento de Estelí, indicó Murillo, sin precisar la fecha del ataque.
“Estuvo en coma todo este tiempo porque resultó lesionado con impacto de bala en la cabeza en el tranque de la muerte de La Trinidad”, agregó.
Según la versión del Gobierno, un “grupo de terroristas” atacó una caravana de vehículos del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), donde viajaba Gutiérrez Ríos.
La represión del Gobierno de Nicaragua hacia personas que protestan contra el presidente Daniel Ortega ha mutado en una “aniquilación y cacería”, informó hoy el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
“Evolución de la represión gubernamental: aniquilación y cacería de la población, por parte de fuerzas parapoliciales con armamento de alto calibre y con características de fuerzas paramilitares”, definió el Cenidh en su más reciente informe sobre la crisis sociopolítica de Nicaragua.
En el mismo informe, el Cenidh señala que al menos 302 personas murieron y otras 2.000 resultaron heridas, “en los primeros 100 días de la represión”, desde el inicio de las manifestaciones, el 18 de abril, hasta el 26 de julio.
De acuerdo con el Cenidh, en este periodo las “fuerzas represivas” del Gobierno han llevado a prisión a unas 1.900 personas, de las cuales se sabe que 482 permanecen detenidas y 98 enfrentan procesos judiciales.
La organización humanitaria no emitió un número específico de personas desaparecidas durante la represión, ya que es variable, y suelen ser encontradas en delegaciones policiales, la cárcel bajo denuncias de torturas conocida como “El Chipote”, y en la morgue del Instituto de Medicina Legal.