El Ministro de Hacienda nos informó que esta semana se habían iniciado negociaciones con el Fondo Monetario Internacional.
PALABRAS DE LA SRA. GEORGIEVA. Como antecedente creo oportuno resumir aspectos de una presentación que hizo la directora gerente del Fondo Monetario, Sra. Kristalina Georgieva, el 9 de abril, Jueves Santo, donde da su visión sobre la crisis y marca las prioridades de la economía global para atender esta emergencia mundial.
Empieza señalando que “hoy nos enfrentamos a una crisis como ninguna otra. Lo que era normal hace solo unas semanas: ir a la escuela, ir a trabajar, estar con familiares y amigos, ahora es un gran riesgo”. Reconoce que hay una enorme incertidumbre sobre la profundidad y duración de esta crisis. ¿Entonces, se pregunta, qué debemos hacer? Desarrolla 4 áreas.
1.-Continuar con medidas esenciales de contención y apoyo para los sistemas de salud. Hay que gastar en esto y pide que no se pongan barreras a la exportación de productos médicos y alimentarios.
2.-Proteger a las personas y empresas afectadas utilizando importantes medidas fiscales y financieras, que sean oportunas y específicas. Se debe evitar que problemas de liquidez se transformen en problemas de solvencia, que hagan más difícil la recuperación.
3.-Reducir las tensiones en el sistema financiero y evitar el contagio en el sector. Rescato que aquí señala que los estímulos monetarios y las facilidades de liquidez tienen un papel fundamental.
4.-Mientras avanzamos en la etapa de contención debemos ir planificando la recuperación. Señala que a medida que la economía se vaya estabilizando y los negocios comiencen a normalizase habrá que moverse rápidamente a impulsar la demanda. Para ello habrá que dar un estímulo fiscal coordinado y tener una política monetaria “acomodaticia”, es decir, amplia.
JALADA DE OREJAS. La verdad que veo una posición realista, flexible, incluso, bastante heterodoxa. No hay temor a utilizar los instrumentos monetarios y los fiscales disponibles. Es más, creo que este planteamiento es una buena “jalada de orejas” a muchas posiciones que, en nuestro mismo medio, andan pidiendo políticas tradicionales, en una época EN que lo único cierto es la gran incertidumbre hacia el futuro. Pero esto no significa que no tengamos que estar pensando en la salida post-virus. Y es por lo que la negociación con el FMI debe ser muy cuidadosa.
EL IFR. Se nos ha informado que el programa que se piensa utilizar es el que se conoce como Instrumento de Financiamiento Rápido (IFR). De hecho, muchos países ya lo están utilizando. Al momento de escribir esto, de Centroamérica han hecho uso El Salvador y Panamá. Detalles de lo que Costa Rica ha avanzado con el Fondo no los conozco en este momento. Pero creo interesante que les comparta una información sobre el programa que tomé de la web del FMI, publicación con fecha del mismo Jueves Santo.
Ahí se explica que para ser beneficiario de estos fondos no se necesita tener un programa económico completo con el FMI y tampoco las revisiones. Se debe mostrar la política económica general que se piensa seguir (lo cual, sin duda, es útil conocer), pero no se llega a un acuerdo completo. Esto da una gran flexibilidad y acceso rápido. El FMI puede pedir algunas acciones previas. Por ello la necesidad de una buena negociación: la condicionalidad, si se presentara, debe ser la menor posible.
De forma que a través de este instrumento se tiene acceso rápido a recursos necesarios, se fijan las líneas generales hacia adelante, sin la necesidad del detalle de un programa. Este punto no es poca cosa; el país debe guardarse grados de libertad para el futuro.
EN CONCLUSIÓN. Hay que hacer una buena negociación con el Fondo. En algún momento después de la pandemia, y en el marco de lo que visualizo como la renegociación del endeudamiento público nacional, sin la menor duda habrá que hacer compromisos con los acreedores y con las instituciones financieras. Por eso guardarse espacios hoy para lo que viene es fundamental. Que no se pretenda dejar amarrado el futuro del país.