El narcotráfico no es exclusivo de hombres, sino que las mujeres están siendo contratadas por los capos que les pagan un poco de dinero para que les transporten las galetas hasta los diferentes centros penales del país.
Durante este fin de semana, dos de ellas fueron detenidas y presentadas ante la Fiscalía por llevar en sus partes íntimas cientos de gramos de diferentes tipos de droga, que en este caso no llegaron hasta los presos adictos.
El primer caso se produjo en el centro penal Gerardo Rodríguez cuando una mujer pretendía ingresar 126,90 gramos de cocaína que llevaba en la vagina, pero el caminado y el nerviosismo la delataron.
La traficante fue llevada al Ministerio Público donde la indagaron y ahora espera alguna medida cautelar, luego de que la agente canina Chana la descubriera con el ilegal cargamento.
Otra fémina fue sorprendida con 131,5 gramos de cocaína que llevaba en el ano en un envoltorio adhesivo en forma cilíndrico con aceite para que resbale, según describió la policía.
MÁS CASOS
Un perro ubicó dentro del ano de un visitante un envoltorio con marihuana, cuando pretendía ingresar el cargamento al módulo de Máxima Seguridad de La Reforma.
Al transportista conocido popularmente como burro lo trasladaron a la Fiscalía de Alajuela donde espera le resuelvan su situación jurídica.
Con este decomiso de 127 gramos ya suman tres las personas investigadas por el delito de introducción de droga a centro penal durante el fin de semana.
En la prisión de Puntarenas las autoridades penitenciarias lograron decomisar 9 teléfonos celulares, 12 artículos electrónicos no permitidos, 10 armas hechizas y 4 litros de chicha.