La Policía Profesional de Migración realizó un allanamiento por el delito de ”Trata de Personas con fines de explotación sexual”
El movimiento policial tuvo lugar en diversas estructuras dentro de una propiedad en San José de Pérez Zeledón.
En el sitio se detuvo a un hombre de apellido Haag y una mujer de apellido Gorman, ambos estadounidenses.
Según la información proporcionada por el Departamento de Seguridad de la Embajada de Estados Unidos el 17 de mayo del 2024, en Phoenix, una mujer afirmó haber sido víctima del delito de trata de personas por un el detenido de apellido Haag, de nacionalidad estadounidense, también conocido como “Williams”.

La mujer menciona que en el sitio había 4 personas privadas de libertad, como si se tratará de un culto espiritual.
En apariencia, 3 de ellas eran de origen norteamericano.
La víctima detalló diversas actividades a las que son forzadas las mujeres del lugar:
- Las hacían tener sexo en línea.
- Eran obligadas a usar collares para perro.
- Eran abusadas físicamente.
- Y otras actividades ilícitas perpetradas por los investigados.
En apariencia, la víctima fue contactada por el imputado Williams vía Twitter (ahora X) para ofrecerle viajar a Costa Rica para formar parte de una “escuela misteriosa” la cual conectaba a las personas de manera espiritual con la naturaleza.
El viaje se concretó para el 19 de marzo del 2019, día que la mujer ingresó al país. A raíz de esto, los imputados iniciaron coordinaciones para trasladarla hasta Tinamaste de Pérez Zeledón.

Allí, la pareja de investigados esperaba a la víctima para ser trasladada hasta la finca (propiedad del imputado bajo una Sociedad Jurídica).
La mujer estuvo en completo dominio del extranjero. Fue despojada de sus documentos, los cuales se le entregaron a la mujer de apellido Gorman.
La víctima expresó que era obligada por ambos a efectuar contenido sexual para adultos. Sus videos eran subidos a una plataforma la cual aún se desconoce el nombre.
Lo recaudado en base a esos videos era transferido a las cuentas de los sospechosos.
Todo lo vivido causó traumas a nivel físico, psicológico y emocional, siendo violentada a sus derechos e integridad al ser expuesta de una manera tan humillante en contra su voluntad.
La víctima lograría huir, y no sería hasta que estuvo fuera de Costa Rica, que se acercaría a las autoridades para formular la denuncia.
La Gestión de Investigaciones de la Policía de Migración solicitó el allanamiento, registro y secuestro de las casas de habitación, estructuras, edificaciones y aposentos conexos que se encuentren dentro de la propiedad.