Valiente dio su última lucha este domingo en San Rafael de Heredia al morir producto de las secuelas que le dejó el ser amarrado y arrastrado varios metros por la parte trasera de un vehículo en Guácimo de Limón.
Desde hace unos días, el can presentó síntomas de alta fiebre cercana a los 40 grados y una infección en la piel por culpa de las heridas provocadas por el maltrato al que fue sometido.
Pese a que en un principio estuvo comiendo y parecía estar bien, todo apunto a que su cuerpo entró en una especie de rechazo y su salud fue desmejorando con el paso del tiempo.
“Ya Valiente descansa, fue una víctima más de las atrocidades que hace el ser humano con todos estos maravillosos animales que lo único que nos dan es amor y compañía, son increíbles. Una persona sin sensibilidad con problemas patológicos totalmente y con una pérdida de sensibilidad al dolor de los seres vivos”, mencionó a Diario Extra el presidente de la Asociación Frente por la Vida, Juan Carlos Peralta.
Las imágenes del perro siendo brutalmente lastimado consternaron a todo el país el 25 de enero cuando una cámara de vigilancia captó el martirio.
Peralta espera que luego de este desenlace, el Ministerio Público tome en cuenta la autopsia como insumo para el proceso judicial que lleva en contra del sospechoso de apellido Calvo, investigado por el presunto delito de maltrato animal.
Según establece el artículo 279 de las reformas de la Ley Nº 4573 (Código Penal) y la Ley Nº 7451 (Ley de Bienestar de los Animales), a quien realice un acto de crueldad en contra de los animales puede ser sancionado con prisión hasta un año.