Soy una mujer de 27 años, vivo en unión libre. Desde la adolescencia me he querido operar una “pancilla” y unos “rollitos” que tengo por ahí. El cirujano plástico me recomendó que de una vez me podía hacer unos retoques, pero mi miedo es que he visto a muchas mujeres que se operan y quedan deformes, rectas de abdomen y con unas nalgas que se ven artificiales y no quiero quedar así.
– La cirugía plástica ha avanzado mucho en los últimos años y son muchas las personas que optan por este tipo de procedimiento. Por lo general, el especialista hace una serie de recomendaciones con el objetivo de que el acabado quirúrgico sea óptimo. Sin embargo, la última palabra la tiene el paciente.
Así algunas mujeres desean por ejemplo implantes mamarios desproporcionadamente grandes, aun cuando el médico recomiende unos de menor volumen, y desde luego se realiza la cirugía que el paciente desea, sobre todo porque la belleza es un criterio muy personal, y cada uno tiene su ideal corporal.
De igual manera cuando se operan la región de la cadera y de las nalgas, usualmente con un leve aumento es más que suficiente, sin embargo, también son muchas las mujeres que optan por dimensiones mucho mayores que resaltan a la vista, y hasta producen extrañeza en muchos, sin embargo, la cirugía responde a los deseos del paciente.
Ejemplos similares los hemos visto en grandes estrellas de cine que se han realizado diversas cirugías con resultados dispares, no porque el médico hiciera mal su trabajo sino porque ese era el deseo expreso del paciente.
Por eso, antes de optar por una cirugía plástica es recomendable comentarlo detenidamente con el cirujano, para que él haga las recomendaciones necesarias y usted exprese sus gustos y sus temores.