Falta de presupuesto y saturación de personal atrasan proceso
Si usted solicita la colocación de un semáforo hoy, podría ser que hasta 2025 pueda cruzar o conducir de forma segura, ya que el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) puede tardar hasta un año en proveer la demarcación solicitada por los usuarios.
Diego Rugama, jefe del Departamento de Semáforos de la institución, expresó que este procedimiento “depende del Departamento de Estudios y Diseño”, y que, a partir de ahí a los trámites y obras de instalación puede sumar un año más de espera.
“El tiempo del tema del estudio depende, ellos realizan estudios de absolutamente todo, desde el semáforo, un reductor, un alto, un cambio de vía, un ordenamiento vial. Hay estudios menores o mayores, y normalmente están bastante saturados”.
Una vez aprobado el análisis, “primero se hace la obra civil y después se instalan lo que son los equipos, dependiendo del presupuesto asignado y si tenemos para instalar nuevos sistemas”, agregó Rugama. Según comentó el funcionario a Diario Extra, el tema presupuestario también es una condicionante para la espera de los semáforos, pues el costo de dichos equipos influye en la cantidad de solicitudes que pueden ser atendidas.
“En promedio andamos por unos 42 sistemas, pero, por ejemplo, el año pasado no había nada de presupuesto, no teníamos equipo y se instalaron solo los siete sistemas. Este año estamos por el orden de los 60 sistemas, ya que el año pasado a finales hubo una compra importante de materiales”, explicó el funcionario.
Sobre esta colocación, Guillermo Carazo, director ejecutivo del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), explica que los estudios necesarios para la colocación de los dispositivos requieren de observación de flujo de tránsito.
“A la hora de definir los temas de seguridad vial y eventualmente parte del diseño, todo depende de unos estudios, pero más que todo es la cantidad de tránsito. El volumen de tránsito es el que determina si un semáforo funciona, o una rotonda, o si funciona un alto sin semáforo”.
El ingeniero además subrayó que, a nivel nacional, hace falta hacer una evaluación de las principales rutas del país, ya que el aumento desmedido de automóviles ha cambiado la dinámica de la circulación.
“La 27 hace rato estamos hablando de un plan de ampliación, la 32 también, la ruta 1 también, ya son carreteras de tránsitos importantes que sabemos que no están cumpliendo. Puede haber otras carreteras regionales que ya tienen una afluencia alta y que tal vez no están dando la talla y que hay que empezar a pensar en otras cosas”, agregó a este medio.
Ciudades como Cartago, Heredia y Alajuela requieren la colocación de nuevos semáforos ante la saturación vial que se presenta principalmente en horas pico.