La Sabana.- El Saprissa tuvo una mañana de ensueño, tranquila, de esas que quisiera repetir cuantas veces sea necesario. En un Estadio Nacional a medio llenar, goleó 4-0 a un Santos que fuera del Ebal Rodríguez luce muy limitado.
Y es que los temores se acabaron muy pronto, porque desde el pitazo inicial, los morados tomaron la iniciativa y no demoraron en abrir el tanteador. David Guzmán ejecutó un tiro de esquina desde la derecha al 8\’ y Kendall Waston, con limpio salto, consiguió empalmar de cabeza para abrir la cuenta.
La acción de Waston es de alabar, pero también se encienden las alarmas en el conjunto caribeño, que no tuvo quien controlara al espigado defensor.
Sin que Santos pudiera reaccionar, al 13\’ Ariel Rodríguez aprovechó que Eduardo Tourborne se resbaló y avanzó en solitario por la izquierda, para efectuar el centro que encontró desmarcado a Manfred Russell, quien remató cruzado, dejando sin oportunidad de reacción a Adrián De Lemos.
Muy rápido y ya Saprissa ganaba 2-0. Al 28\’ sin embargo Carlos Hernández se la perdió a solas con el arco, era una excelente acción para descontar y sembrar dudas en los morados.
Y al 36\’, de nuevo Waston, con otro cabezazo, convirtió el 3-0, recibió de otro tiro de esquina, esta vez desde la izquierda y ejecutado de nuevo magistralmente por David Guzmán.
Saprissa entonces goleaba y jugaba a placer ante un Santos que resintió la ausencia de Walter Cheves en el medio. El liberiano purgó este encuentro por haber sido expulsado ante Cartaginés.
Mario Víquez desvió al 40\’ cuando parecía que caía el cuarto de los morados. Santos lucía muy endeble en su última línea.
Al 71\’ se pudo dar el descuento, pero en polémica acción sorprendieron en dudoso fuera de juego a Josué Martínez.
Mauricio Castillo selló la cuenta al 80\’, disparó desde fuera del área, potente, de zurda, y lo celebró con todo, pues es mucho lo que ha batallado para tener oportunidad en el once de Rónald González.
Pese que las cosas no le salían a Santos, hay que destacar que sus jugadores mostraron entrega y de allí, que Juan Vicente Solís estuviera a punto de descontar al 85\’, mas su disparo a quemarropa fue desviado en gran forma por el guardameta mexicano Luis Michel.