Paulo César Wanchope le habría ganado la carrera a Hernán Medford para ser el nuevo técnico del Monstruo. El estratega llegó a un acuerdo verbal con el conjunto morado para ser el encargado de llegar en lugar de José Giacone, según trascendió en las últimas horas.
El exjugador dejaría de ser asistente técnico de Miguel “Piojo” Herrera en la Sele para ponerse la camiseta del Saprissa como entrenador, siendo este el principal detalle que haría falta para hacer oficial el arribo de Wanchope al cuadro tibaseño.
Chope buscará cerrar su relación contractual con la Fedefútbol durante la mañana, para en la tarde estampar su firma con la S. En el cuerpo técnico estaría acompañado por Gilberto “Tuma” Martínez.
Sobre la mesa de la dirigencia morada tomó fuerza el nombre de Medford, actual técnico del Marquense de Guatemala, sin embargo, el aspecto económico inclinó la balanza en contra del Pelícano.
Además, dos figuras que también trascendieron como opciones para tomar el mando del Monstruo fueron Douglas Sequeira, que está dirigiendo al Inter San Carlos de la Liga TRANSCOMER de Ascenso, y Minor Díaz, que está de agente libre luego de su salida de Liberia.
Wanchope trabajó en el Saprissa como gerente deportivo entre 2015 y 2017. Uno de sus grandes puntos a favor fue el fichaje del volante argentino Mariano Torres.
Pecados monstruosos
Giacone fue el hombre que pagó los platos rotos por la crisis de resultados del Monstruo, siendo cesado de su puesto como técnico del primer equipo. La derrota contra Cartaginés en la Jornada 11 del Clausura 2025 fue la gota que derramó el vaso de la dirigencia.
El estratega argentino se marchó por la puerta de atrás, con más penas que glorias en cinco meses al frente de la institución. El balance con el Saprissa fue de 13 victorias, siete empates y ocho derrotas en 28 partidos dirigidos para un rendimiento del 54,7%.
Sin embargo, ¿cuáles fueron los pecados que lo condenaron?
Peores resultados: Los principales puntos que se le achacan son no pasar de la final de segunda fase en el campeonato nacional anterior, quedar eliminado en la primera ronda de la Copa de Campeones de la Concacaf y estar fuera de zona de clasificación en este semestre, el Clausura 2025.
En el torneo pasado los morados no llegaron a la serie por el título nacional tras perder contra el Team, en la Concachampions dejaron ir una ventaja conseguida en el partido de ida frente al Vancouver Whitecaps para terminar perdiendo 3-2 en el global y durante el certamen en curso dejó al equipo en la sexta posición con 15 puntos en 11 jornadas disputadas.
Alineaciones: Los malos resultados de la S van de la mano con las pifias en las oncenas titulares. El timonel no escapó de los cuestionamientos por sus alineaciones.
El cambio de Kendall Waston como delantero fue el que más polémica provocó, no obstante, no fue la única decisión desacertada. El timonel sacó del mapa al joven Kenay Myrie y apostó en los últimos encuentros por un Jefry Valverde que tenía fechas de no ser de la partida.
Sin embargo, una de las primeras críticas fue la de Eduardo Anderson. El defensa panameño estaba en la puerta de salida para este semestre, solo que Giacone confió en él, se “casó” con el canalero y lo afianzó como uno de sus jugadores más regulares, al igual que con Ryan Bolaños.
Más culpables
Eso sí, no todo es culpa de Giacone. La afición no perdona y también carga de responsabilidad a la gerencia deportiva, con Sergio Gila como gerente deportivo, y a la dirigencia, con Juan Carlos Rojas como estratega.
El cuerpo técnico tibaseño no contó con los refuerzos extranjeros (Sabin Merino y Nicolás Delgadillo) hasta la Jornada 8 del Clausura 2025 por la falta de los permisos migratorios de trabajo. Además, Nicolás Delgadillo no estuvo disponible para el cotejo de vuelta de la Concachampions por no tener la visa para viajar a Canadá.