Un total de 26 mociones buscan retrasar aún más la aprobación del expediente 20.861, iniciativa que pretende establecer límites a las tasas de usura que cobran tarjetas de crédito, empresas de venta de electrodomésticos, prestamistas, garroteras, en entre otros. Así lo señalan diputados a favor del plan.
La mayoría de estas mociones las presentó el legislador independiente Erick Rodríguez.
Tras un análisis de una a una de las “sugerencias” presentadas por Rodríguez por parte del despacho del oficialista Welmer Ramos (uno de los principales impulsores del proyecto) se determinó que no tienen mayor sentido y solo buscan poner un obstáculo más en una ley que podría generar alivio económico a muchos costarricenses.
PONER POR PONER
Los parlamentarios tienen la posibilidad de presentar mociones a un proyecto cuando creen que es necesario mejorarlo o modificar un aspecto que podría ser erróneo, generar confusión o incluso rozar con la Constitución Política.
Pero también en algunos casos lo hacen como estrategia para evitar que la propuesta avance.
En el caso del proyecto de usura las mociones parecen tener ese fin.
Por ejemplo, en las mociones 1, 3, 4 y 5 una de las sugerencias es cambiar los términos de “entidades no financieras” por “entidades no bancarias”.
O bien las 21 y 22 que proponen modificar el título del proyecto o la 25 que se consulte a entidades como el Banco Central, al Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) o a la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef), cuando en la construcción de esta iniciativa se han tenido diversidad de reuniones con esas entidades incluyendo sus recomendaciones y observaciones.
METER GOLES
Pero algunas incluso se podrían catalogar de peligrosas o de querer “meter un gol”.
Hoy día el Código Penal ya establece el delito de usura que se regula en su artículo 243.
Pero las mociones 2, 3, 4, 5 lo dejarían inoperante al eliminar la referencia a dicho artículo.
La moción 8 busca restar peso al trabajo de la Comisión Nacional del Consumidor, al modificar la palabra “homologar” por “revisar” las propuestas de contrato que los proveedores de servicios financieros trasladan al solicitante de un crédito, para eliminar cláusulas abusivas, entendiendo estas como las que superen los límites establecidos en el artículo 63 bis de esta ley.
Las mociones 9,13, 14, 15 y 16 eliminan el primer párrafo que plantea que la exigencia de intereses desproporcionados, en contra de los límites señalados en esta ley (7.472), es una conducta constitutiva del delito de usura y vuelve a los artículos desactualizados del Código Penal en los párrafos segundo y tercero.
También elimina el último párrafo, que plantea que la Comisión Nacional del Consumidor debe remitir el expediente a los órganos jurisdiccionales penales y cambia parámetros vigentes del delito de 100 salarios a 40 salarios base, luego a 50 y en la siguiente a 60.
RETRASAR VIGENCIA
El frenteamplista José María Villalta denunció que el propio Rodríguez les dijo que quitaría las mociones si llegan al acuerdo de que la ley entre en vigencia en enero y no en julio próximo.
Vilalta cree que eso sería un crimen contra las personas que están agobiadas por las usuras, ya que la crisis actual hará que prácticamente todas las familias deban renegociar sus créditos.
“Pareciera que lo que buscan es poder servirse de la usura en momentos en que la población está desesperada y quieren retrasar la entrada en vigencia de la ley, de una forma egoísta y angurrienta, para que esta renegociación se haga bajo las mismas tasas de usura de hoy”, indicó el frenteamplista.
“Las mociones fueron presentadas con la intención de bloquear el proyecto de ley, de obstruir su trámite, ya que no buscan mejorarlo sino entorpecerlo o atravesarle el palo a la rueda”, enfatizó.
Similar opinó el liberacionista David Gourzong. “Los costarricenses deben de saber cuáles diputados están colaborando para sacarlos de esta emergencia. Sin duda momentos difíciles nosotros como diputados debemos de velar por el país como un todo. El proyecto de control de la usura va a permitir que muchas familias dejen de recurrir a prestamistas porque ni los bancos privados ni los públicos les quieren dar dinero. Unos pocos diputados protegen al sector más rico de este país que son precisamente los bancos, estos son los que están promoviendo algunas mociones para seguir promoviendo algunas mociones para seguir sacando cabos de oro de la pobreza”.
AVANCE
Este lunes existiría un acuerdo de la mayoría de los diputados para aprobar una moción que dispensaría de todo trámite al expediente, lo que permitiría agilizar su aprobación final. Una vez el plan se comience a conocer en el pleno se deberían ver las mociones que se presenten, hasta el momento son 26.
El proyecto establece fronteras del 39% (en colones y un 31,35% en dólares) para todo tipo de créditos (préstamos, tarjetas, línea blanca, etc.) y un 55% en colones y 45,66% en dólares para los llamados microcréditos, esto permitiría la no exclusión financiera.
Para efectos de la ley, los microcréditos son aquellos que no superen los ¢675.300.
Las tasas máximas señaladas serán calculadas y establecidas por el Banco Central de Costa Rica, el cual las deberá publicar, en la primera semana de los meses de enero y julio de cada año, en La Gaceta y en su página web.
Estas tasas se aplicarán para todo contrato, negocio o transacción efectuada en el semestre siguiente al de su publicación. Además, establece una sanción de 6 meses a 2 años de cárcel por el delito de usura que ya está tipificado en el Código Penal.
*Colaboró la periodista Krissia Morris.
SALE MUY CARO
De acuerdo estimaciones de la Academia de Centroamérica, el Estado de la Nación y el Ministerio de Economía Industria y Comercio (MEIC), en el 2018 los intereses por usura en las entidades comerciales sumaron ¢2,3 billones.
En promedio los bancos cobran intereses vía tarjetas de crédito a un 49%, lo que significa un interés anual acumulado total de ¢638 mil millones.
En el caso de las casas de empeño y algunos bufetes, la usura se calcula en promedio en un 90%, lo cual genera intereses anuales por ¢610 mil millones.
El 29% de los hogares financia sus electrodomésticos con deuda. El interés en promedio de los almacenes es de un 60% y hoy generan intereses anuales por ¢883 mil millones.
TICOS OPINAN
Marco Aurelio B.
Alajuelita
“Estaría bien que bajen los intereses ante la situación actual, que le ayuden al pueblo porque el día de mañana no alcanza el sueldo, que por lo menos los bajen o amplíen los plazos para pagar”.
Ronald Rivera
Desamparados
“Sería bueno para todos los que tienen deudas en los bancos y con tarjetas y con lo que cobran otras empresas”.
Heiner Zúñiga
Desamparados
“Por supuesto espero que bajen los intereses porque con esta situación que estamos pasando donde muchos no tenemos trabajo cómo vamos a hacer frente a esos pagos”.