Un nicaragüense de apellidos Pérez Salinas, quien hirió al chofer de un autobús de Empresarios Unidos en la autopista General Cañas y roció con gas pimienta a los pasajeros para robar sus pertenencias, fue detenido por oficiales de la Fuerza Pública y de manera insólita horas después lo dejaron en libertad.
Los afectados pudieron recuperar las billeteras y celulares que el sospechoso les habría sustraído, mientras que el conductor de la unidad de transporte público fue trasladado a un centro médico para que recibiera atención hospitalaria.
Por su parte, Mario Zamora, ministro de Seguridad Pública, informó que Pérez Salinas descontó pena en un centro penal por el delito de homicidio y, pese a ser detenido en flagrancia, fue liberado tras su presentación ante las autoridades competentes.
“Nos enteramos, lo cual nos ha causado mucho desasosiego porque no ha sido detenido. Quedó libre, fue puesto a disposición judicial”, manifestó.
El funcionario lamentó que no se le dictaran medidas cautelares propias de estos hechos delictivos. “Lamentablemente no se le aplicó la prisión preventiva a alguien que tiene todo el patrón de reiteración de la actividad criminal”, añadió.
Dijo estar impactado ante la noticia de su liberación, aseguró que es insólito que una persona que presenta este comportamiento y nivel de peligrosidad quede en libertad, “y en posibilidad de cometer sus fechorías en perjuicio de la gente”.