Varios grupos ambientalistas consideran positivo que el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) realice talleres de minería artesanal a pequeña escala en Abangares de Guanacaste y Miramar de Puntarenas, sectores donde desde hace décadas se practica.
De acuerdo con Edgardo Araya, abogado ambientalista y exdiputado, esto representa un paso hacia adelante para cumplir con el Convenio de Minamata, el cual pretende que se deje de usar el mercurio en la extracción de oro.
“Hay que recordar que la minería subterránea en la zona de Abangares es una actividad legalmente permitida, por lo que vemos con buenos ojos todos los esfuerzos para que se pueda hacer de la forma menos dañina posible”, manifestó.
Asimismo, recordó que en 2010 se estableció en el Código de Minería la obligación del Estado de reconvertir a estos mineros artesanales a otras actividades económicas sostenibles con el medioambiente.
Por su parte Bernal Gamboa, abogado de Ni una mina más, externó que “Lo ideal es que si se va a hacer minería en Abangares y Miramar se haga de la mejor manera posible”.
Además, señaló que en el pasado se han visto impactos ambientales en esas zonas, pero significativamente más leves que los registrados en minas a cielo abierto, como en el caso de Crucitas.
INICIATIVA
Esta semana se llevaron a cabo dos talleres de lanzamiento de la fase preparatoria para el proyecto Oportunidades globales para el desarrollo a largo plazo del sector de la minería de oro artesanal y en pequeña escala en Costa Rica. Esta iniciativa forma parte de la implementación del Plan Nacional de Acción para la extracción de oro artesanal y en pequeña escala en Costa Rica, la cual es desarrollada por el Minae junto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), la Alianza por la Minería Responsable (ARM), la Dirección de Geología y Minas (DGM) y la Dirección de Gestión de Calidad Ambiental (Digeca).
En los talleres participaron la Municipalidad de Abangares y grupos interesados, tanto de Abangares como de Miramar.