En lo que va del año
La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) informó que la Policía Profesional de Migración (PPM) deportó al menos 1.021 extranjeros de Costa Rica en lo que va del año. Del total, 893 eran de Nicaragua, 34 de Colombia y 16 de Panamá.
El proceso más reciente se ejecutó este 16 de octubre cuando expulsaron a 29 nicaragüenses, detectados en los diferentes operativos de control migratorio que se desarrollan en el país, por estar al margen de las normas nacionales.
De acuerdo con las autoridades, los extranjeros fueron trasladados al Centro de Aprehensión Región Central, ubicado en Los Lagos de Heredia.
Cabe señalar que, de la cantidad mencionada inicialmente, 600 personas fueron deportadas por encontrarse en condición migratoria irregular y cerca de 330 por tener antecedentes penales.
Además, aquellos localizados en puestos no habilitados en Paso Canoas y Peñas Blancas fueron remitidos por las oficinas regionales a la Fiscalía de Corredores y Liberia, respectivamente, por uso de documento falso, pues presentaron cédulas y permisos laborales fraudulentos.
La Policía Profesional de Migración aplica las medidas que la ley migratoria permite, cumpliendo el proceso correspondiente en beneficio de la seguridad de la nación.
FLUJO MIGRATORIO
La DGME también indicó que 276.000 migrantes han transitado por Costa Rica desde hace un año, cuando dio inicio el acuerdo binacional con Panamá. Por día ingresan en autobús aproximadamente 1.000 personas.
El flujo controlado le permite a la Policía de Migración detectar a quienes tienen antecedentes altamente delictivos, que son enviados con las autoridades nacionales y se les aplica la deportación. “La Dirección General de Migración y Extranjería, a través de una coordinación interinstitucional y organismos internacionales, ha trabajado en las mejoras del Centro de Atención Temporal para Migrantes (Catem), como lo son hoy los espacios seguros para niños, área de lactancia y mantener los servicios básicos para continuar velando por el respeto a los derechos humanos de esta población”, detalló la entidad.
El año anterior, la PPM cerró la operación en el Campo Ferial con el fin de evitar que los migrantes permanezcan en diferentes puntos del cantón de Corredores, exponiéndose a ser víctimas de delitos.