Vaticano. (AFP) – El estado de salud del papa Francisco se mantuvo “estable” este domingo, aunque su pronóstico sigue siendo “reservado”, cuando se cumplen 17 días de su ingreso en el hospital Gemelli de Roma, desde donde agradeció a los fieles.
“Quisiera darles las gracias por las oraciones, siento vuestro afecto y cercanía. En este momento particular me siento como llevado y sostenido por el pueblo de Dios”, escribió el pontífice argentino de 88 años en su mensaje del Ángelus.
El líder espiritual de 1.400 millones de católicos en el mundo se encuentra internado desde el 14 de febrero por una bronquitis que derivó en una doble neumonía. Desde entonces, no ha hecho ninguna aparición pública.
Se ausentó del tradicional mensaje del Ángelus desde la plaza de San Pedro por tercera semana consecutiva y tampoco lo realizó desde un balcón del hospital, como hiciera durante 2021.
“La primera idea cuando llegas a la plaza es mirar a la ventana en la que suele aparecer. Por desgracia ahora hay que seguir esperando”, aseguró Lorena Compare, una contable de 49 años de Como, en el norte de Italia.
El último parte médico difundido por la Santa Sede el domingo por la noche, informó que se encuentra “estable”, después de una recaída provocada por una crisis respiratoria de “broncoespasmo”. Su pronóstico sigue siendo “reservado”.
La crisis del viernes hizo saltar de nuevo todas las alarmas sobre su salud, ya que empeoró horas después que una fuente vaticana confirmara su salida del estado “crítico”. “La conclusión que sacamos es que no hay al menos aparentemente por el momento más consecuencias con respecto a la crisis del viernes”, indicó una fuente vaticana, que se mostró cauta porque el cuadro clínico sigue siendo “complejo”. Una de las diferencias respecto al día anterior es que el jesuita ya “no precisó ventilación mecánica no invasiva, sino solo oxigenoterapia de alto flujo”, precisa el último informe médico.