Nada está escrito o estipulado acerca del amor, de cómo nos enamoramos, de cómo y con quién nos relacionamos. Voy a mencionar un caso muy común: cuando te gusta el novio de tu mejor amiga, qué hacer, hasta dónde se pueden traspasar los límites.
Existen varias vertientes:
1. Que el novio de tu amiga tan solo te guste, pero nadie lo sabe y él te ignora.
2. Que él no lo ignore y te demuestre que no le eres tan indiferente, aun cuando sigue con tu amiga.
3. Que ellos ya hayan terminado y él te busque a ti.
4. Y la peor de todas, que hayan terminado por ti.
La situación es complicada desde cualquiera de los puntos, sobre todo porque en este tipo de triángulos uno de los tres saldrá siempre afectado, y en otras ocasiones todos.
Muchas veces lo que incita este tipo de situaciones es la cercanía con tu mejor amiga, que los tres salgan juntos muy seguido (tú de mal tercio), además de todas las maravillas que tu mejor amiga te cuenta de su Romeo.
Cuando era adolescente comencé a salir con mi mejor amiga de la secundaria, con su novio y los amigos de su novio; tendríamos escasos 16 años. Marina no tenía tanta suerte con los chicos, rara vez se le acercaban, pero Gerardo la comenzó a cortejar debido a que su hermano era profesor en la escuela (de esto nos enteramos después). A mí me presentaron a Ignacio y en varias ocasiones salíamos los cuatro, hasta que los papás de Marina le restringieron los permisos. Así terminaba saliendo yo con Gerardo, Ignacio y los que se pegaran.
Lo incómodo en esta historia fue que Gerardo comenzó a tirarme la onda a mí, me llamaba seguido a casa y no hablaba de Marina para nada. Algunas veces me localizaba en casa de otras amigas tan sólo para hablar conmigo. El colmo fue cuando me consultó cómo le podía hacer para cortar a Marina… qué dilema. En este caso fue fácil ya que Gerardo no me atraía en lo más mínimo, y aunque así hubiera sido lo hubiera ignorado: para mí valía millones de veces más la amistad de Marina que un tipo tan falto de valores y sentimientos. A pesar de mi corta edad, supe ponerle un alto a Gerardo y sutilmente continué mi amistad con Marina sin que ella se enterara de todo lo que ocurrió “detrás de cámaras”. Todo se resolvió de la mejor manera.
¿Qué sucede cuando a ti sí te interesa el novio de tu amiga? Sabemos que en el corazón no se manda, pero en la cabeza sí: todo está en la mente y en el contexto de la situación. También todo esto depende de tus valores y del grado de amistad que mantengas con tu amiga.
En referencia a este tema, no dude en solicitar la primera cita para que podamos evaluarle. Teléfono: 8872-0670 con la Dra. Morales. Facebook: Psicología Clínica y Salud.