Según datos de la Policía de Tránsito, hasta octubre, un total de 1.504 conductores fueron sancionados por avanzar con la luz roja del semáforo, y otros 111 decidieron seguir sin hacer el Alto obligatorio en una intersección.
En promedio, cada 4.5 horas, un conductor es multado por estas infracciones, que representan un riesgo grave en las vías.
La multa por estos actos asciende a ¢246 mil colones y acumula 4 puntos en la licencia.
El director de la Policía de Tránsito, Oswaldo Miranda Víquez, señaló que estas conductas suelen estar ligadas al abuso de la velocidad, una de las principales causas de muertes en carretera, con 138 fallecimientos registrados en lo que va del año.
“Lo que sucede es que, a veces, por ganarse una fase del semáforo, de 15 segundos, de 40 segundos, se cometen imprudencias de este tipo que les cuesta la vida a ellos, o se la causan a otros, siendo los más vulnerables y expuestos los peatones, quienes confiados en la luz del semáforo o en la existencia de la señal de Alto, cruzan la calle, y son atropellados”, explicó Miranda.
En esta época de fin de año, la Policía de Tránsito hace un llamado a la prudencia, ya que el incremento en las actividades sociales y las compras navideñas puede incentivar a los conductores a exceder la velocidad y desatender las señales de tránsito.