María Lucía Fernández Garita, titular de la Superintendencia General de Valores (Sugeval), confirmó a DIARIO EXTRA que optará por quedarse en el cargo, luego de que venza su nombramiento en diciembre.
“Mi respuesta es que por aspectos de oportunidad estaría presente. Soy una profesional que lleva 30 años en el sector financiero y me siento joven”, manifestó.
Aseguró que hasta donde tiene información el concurso todavía no está abierto, pero que cuando sea así participaría. “Yo ya pasé por un concurso público cuando fui electa superintendente, hace cinco años. Tuve la fortaleza por mis capacidades y por eso fui seleccionada, cumplía con los requisitos y hubo una participación concurrida”, manifestó.
Sobre si la experiencia sería una ventaja competitiva indicó que habría que ver a los demás participantes, pero tiene su peso y en su periodo han entrado en un proceso de fortalecimiento del mercado de valores en diferentes áreas.
Hizo referencia a capitales de riesgo, fondos sostenibles y la transformación digital de la Sugeval. Reconoció que nunca ha estado en materia de seguros, pero está dispuesta a aceptar el reto.
“La decisión del Consejo (Conassif) es integrar una única superintendencia. La ley tiene superintendencias separadas, habría que ver qué interpretaciones hay, es un arreglo del Consejo.
Cada uno de los mercados tiene sus diferencias, incluso en regulaciones, es como el bancario y de pensiones, pero hay una sola superintendente.
Es un gran reto para cualquiera porque, como le digo, son áreas verticales del sistema financiero”, señaló.
Fernández se desempeñó como subgerente del Banco Central de Costa en el periodo 2012-2017, fue gerente general de Interfín Banex Pensiones, Operadora de Pensiones Complementarias (IBP Pensiones) y gerente general de Banex Sociedad Administradora de Fondos de Inversión, entre otros.
Flora Fernández, inversionista y voz cantante del caso Aldesa, ha pedido al Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) que no tome en cuenta a María Lucía Fernández, e incluso ha solicitado su despido, así como el del grupo de colaboradores que estaban al momento en que se destapó el escándalo por el que se adeudan aproximadamente $200 millones a al menos 500 inversionistas.
LA SOMBRA DEL CASO ALDESA
La principal queja de Flora Fernández es que hubo muchas señales que pudieron alertar de lo que estaba ocurriendo y habrían pasado inadvertidas por la Sugeval, dejando a los inversionistas en un estado de indefensión.
Era justamente Fernández quien ocupaba el cargo de superintendente de Valores para ese momento. Al igual que otros funcionarios llegó a un arreglo económico precedido por la Procuraduría General de la República en el proceso seguido por incumplimiento de deberes.
Consultada al respecto, la superintendente manifestó que ella respetará la voluntad del Conassif, pero insiste en que su labor se hizo de manera limpia y apegada al marco legal. “Lo mantengo”, recalcó.
“Existen riesgos en el mercado y hay que enfrentarlos. He dedicado mi tiempo y esfuerzo a lograr resultados”, añadió.
ACCIONES POSTERIORES AL ESCÁNDALO
Tras estallar el caso Aldesa, la Sugeval comenzó con una serie de reformas y se comenzó a pedir información a cualquier empresa del grupo vinculado, aunque no tenga actividades financieras.
De igual modo, se aplicó una reforma al Reglamento de Oferta Pública para que se clarificara cuando se está en presencia de valores privados, de modo que se debe revelar si hay captaciones privadas.
A diferencia de antes de 2019, hoy si hay más de 50 inversionistas o es una oferta masiva debe registrarse ante la Sugeval. Asimismo, se pusieron reglas especiales cuando se trata de emisiones privadas de un mismo grupo relacionado y la divulgación.
Uno de los argumentos de los inversionistas de Aldesa es que no había forma de saber si estaban colocando por medio del Puesto de Bolsa regulado o la oferta privada.