La ciudad se está recuperando gradualmente de su brote más grave hasta la fecha, que a principios de este mes llevó a las autoridades a cerrar los casinos y la mayoría de los negocios durante casi dos semanas.
La temperatura alcanzó 34ºC el sábado por lo que se permitió a los residentes de Macao \”entrar a la playa para caminar y relajarse\”, pero los funcionarios prohibieron las actividades acuáticas.
Los bañistas deben \”usar en todo momento mascarillas de la especificación correcta, mantener el distanciamiento social, evitar reunirse en multitudes y abstenerse de hacer ejercicio extenuante\”, indicó el gobierno.
Las familias acudieron en masa a la playa Hac Sa de Macao el sábado por la mañana.
Macao se adhiere a la política de \”cero covid\” de China, que pone fin a los brotes de contagios con estrictos confinamientos, controles fronterizos y medidas de distanciamiento social.