Este país cuenta con una sólida y longeva democracia, de entre las más funcionales del mundo, y está organizado como una República presidencialista unitaria. Su gobierno está formado por tres Poderes separados e independientes: el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial.
Cada cuatro años se realizan elecciones para escoger al nuevo presidente y hasta hoy todavía no hemos tenido un proceso electoral amañado ni nada que se refiera a un fraude electoral, aunque impugnar el conteo de votos es algo normal.
Para el 1ᵒ de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, siempre son los mismos discursos, tanto del sector sindical como de la parte presidencial. Un asunto, ¿por qué es tan difícil gobernar este país? Los problemas son muy conocidos: el alto costo de la vida, falta de fuentes de trabajo, la inseguridad, el flagelo del narcotráfico, trabajar la tierra se puso difícil, la prensa está entre ojos y, muchas otras cosas más.
Aquí todos somos conocidos. Vemos que al presidente Rodrigo Chaves, con todo respeto, creo que se complica la vida para capitanear la nave y eso que es un navegante de aguas profundas que se formó en el exterior. Es bien conocido que el presidente tiene sus misiles disparando a la Contraloría General de la República (CGR) y a la Asamblea Legislativa, pero el Poder Judicial no tiene refugio.
Todos deseamos ver a Costa Rica mejor. Cada mandatario tiene su propio estilo de gobernar un país. No sabemos si nuestro presidente se va por el estilo Robin Hood o se inclina por el presidente salvadoreño Nayib Bukele.
Otro asunto, hablando del primer Poder de la República, cómo hay diputados que participan en manifestaciones contra el gobierno si también estos tienen su cuota de responsabilidad en los problemas del país, pero lo más vacilón, cómo es eso de que una distinguida diputada, como no se le permitió entrar como abogada a la cárcel de La Reforma, sí pudo entrar de visita como diputada. ¿En qué manos estamos?
El tico es mil veces pura vida, para qué más broncas, eso de usar el mecanismo del referéndum para sacar adelante proyectos de Casa Presidencial parece más bien a una muestra de debilidad. Seguir con el tema de la venta del Banco de Costa Rica ya se tuvo una amarga experiencia de un banco, y seguir con esa iniciativa, no creo que se vaya a aliviar la carga fiscal. El pueblo necesita de gobernantes que se les puede mirar a los ojos con toda confianza. Como está la situación de este país, se necesita que los tres Poderes trabajen en armonía y, por otra parte, también se debe contar con el apoyo de la ciudadanía.