La fiesta que llevaba Fabricio Villarreal Arce, de 24 años, se la cortaron abruptamente frente a la Discoteca Republik en Quepos.
Mientras estaba afuera conversando se le acercaron dos sujetos en una motocicleta y sin mediar palabra el que iba de acompañante sacó una escupefuego 9 mm de cargador modificado para mandarle 17 plomos. Lo pegó en múltiples oportunidades y lo dejó en el sitio sobre un charco de sangre.
La conmoción no tardó en hacerse presente, los pocos testigos gritaban y de inmediato enrumbaron el camino hacia el Hospital Max Terán de Quepos, no obstante, la vida del hombre pendía de un hilo y se le esfumó entrando al parqueo del centro médico.
AMPLIO EXPEDIENTE
De acuerdo con las autoridades de la Fuerza Pública, Villarreal no era ningún angelito y contaba con antecedentes delictivos.
“El fallecido contaba con antecedentes por violencia doméstica, tráfico de drogas, tenencia de drogas e incumplimiento de medidas. Se encontraba en libertad con medidas cautelares desde el año 2018. Y en enero de este 2023, había sido detenido, una vez más, por infracción a la ley de drogas. Nuevamente fue puesto en libertad. Hoy (ayer) fue asesinado, aumentando la cifra de homicidios en Costa Rica”, indicaron mediante un comunicado de prensa.
DROGAS
En apariencia el homicidio, que ya es investigado por las autoridades judiciales, tiene que ver con un ajuste de cuentas por drogas, ya que en el pueblo al ahora occiso se le conocía como un aparente vendedor y presuntamente estaba metiéndose en el territorio de otro narco.
Pese a que ya le habían advertido que no lo hiciera, el ahora occiso no hizo caso y le apagaron la vida.
“El Ministerio de Seguridad Pública seguirá haciendo de conocimiento a la población y a las autoridades judiciales sobre este tipo de casos, para una conciencia de cuál es la realidad a la que la policía se está enfrentando. Por supuesto que, aun cuando estos hechos lamentables ocurren, nuestro compromiso está con la responsabilidad que tiene esta institución de brindar una mejor seguridad a la ciudadanía”, explicaron.
Recordemos que el ministro de Seguridad, Jorge Torres, ha señalado el daño que vienen haciendo este tipo de personas a la sociedad, simplemente porque los jueces deciden ponerlos en libertad aun cuando tienen las pruebas incriminatorias.
Cabe destacar que además del occiso, resultó herido con un roce por arma de fuego en el glúteo izquierdo Héctor Gerardo Vargas Vélez, conocido como Málaga.
Tanto el fallecido como el herido vivían en barrio Inmaculada de Quepos.