Amordazado, maniatado y guindado de un árbol hallaron sin vida al profesor pensionado Álvaro Araya Alpízar. Sus restos fueron ubicados en la parte trasera de la casa de uno de sus hermanos en Calle San Juan de San Ramón, Alajuela.
De acuerdo con Ólger Araya, hermano del fallecido, su pariente cuidaba de su madre cuando se registró la emergencia. “Nuestra madre vive sola y está enferma, por lo que siempre nos turnamos, esta vez le tocaba a él. Mi casa queda a la par de la de él, me pude percatar de esta situación al ver el cuerpo en el aire, no sé en qué momento se registró esta emergencia”, declaró.
El familiar asegura que la vivienda de su madre estaba abierta y le faltaban varias pertenencias. Autoridades judiciales se encargaron de recopilar evidencias y dar con las verdaderas causas que llevaron a la muerte de Araya.
Supuestamente faltaban joyas y electrodomésticos. Sin embargo ninguno de los parientes escuchó gritos o forcejeos en la madrugada.
Los agentes se encargaron del levantar el cuerpo y recopilar evidencias. De momento no se tiene sospechosos, menos las causas de muerte.