El paso del a onda tropical número 21 por el territorio nacional sigue causando estragos, al punto en que ocho cantones han enfrentado emergencias a raíz de las fuertes lluvias del jueves.
Debido a los fuertes aguaceros, las autoridades nacionales reportaron 11 incidentes en los que las inundaciones y terraplenes fueron lo que más afectación presentó a los vecinos.
De acuerdo con Sigifredo Pérez, jefe de Operaciones de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) han recibido gran cantidad de llamadas alertando lo sucedido.
“Se han reportado hasta el momento 11 incidentes, de los cuales 7 son por inundación en los cantones de Desamparados, La Unión donde se registraron 2 accidentes y 1 en el cantón de Corredores”, dijo.
“Además tenemos 1 solicitud en San Carlos, 1 en el cantón central de San José y 1 en Tilarán, también 4 solicitudes de inspección que se han generado en la zona de Desamparados, Coronado, El Guarco y San José”, sostuvo.
Según Pérez, los Comités Municipales de Emergencia, han dado trámite a las incidencias que se han generado de momento, por lo que no hay requerimientos de apoyo por el momento, sin embargo, se mantienen alertas.
Al mismo tiempo, comentó que los daños o los reportes generados por inundación, son básicamente por saturación de sistemas de alcantarillado que se han presentado producto de las fuertes lluvias.
Otro punto que les preocupa es la zona de Guanacaste, donde el río Cañas se rebalsó a niveles alarmantes, mientras que en la zona de Pococí el río Costa Rica presentó un crecimiento importante.
CERRARON LA 32
El fuerte aguacero hizo que las autoridades nacionales tomaron la decisión de cerrar de manera preventiva el paso por la Ruta 32, pues se temía que se dieran derrumbes y quedaran personas atrapadas, tal como sucedió hace algunos días.
La Dirección General de la Policía de Tránsito (DGPT) y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) informaron que la reapertura de la Carretera Braulio Carrillo será hasta hoy a las 6 a.m. luego de una inspección.
Durante el último mes, los cierres en rutas nacionales por deslizamientos o inundaciones se han vuelto un tanto común, afectando a miles de personas y dejando pérdidas millonarias.
A mediados de julio, las autoridades del MOPT contabilizaron que doce horas de lluvia dejaron daños por ¢5.000 millones en infraestructura vial, cifra que se estima aumente conforme más ondas golpeen el país.
Posibles socavamientos pueden dejar más pérdidas y salirle muy caro al Estado la reparación y limpieza de muchas de las principales carreteras nacionales y vecinales.
TURISTAS SE LLEVAN SUSTO
La tarde del jueves un grupo de turistas se llevó un gran susto, luego de que una cabeza de agua los alcanzara en el río Fortuna, centro turístico administrado por la Asociación de Desarrollo de La Fortuna, San Carlos.
De acuerdo a la información de bomberos, en el lugar había unas 300 personas cuando de pronto comenzó a bajar una cabeza de agua, sin estar lloviendo y sin que el río diera alguna señal que alertara a los bañistas.
Fue el rescatista del lugar que se percató de lo que pasaba y comenzó a gritarle a la gente para que saliera del río, la mayoría lo lograron, pero 4 hombres y una mujer, todos de origen belga, fueron alcanzados por la cabeza de agua.
“Fueron arrastrados unos 50 metros y quedaron en una isleta, debimos utilizar cuerdas para rescatarlos, maniobras que tardaron unos 40 minutos”, explicó el bombero Guillermo Hernández.
Agregó que todos salieron ilesos, solo uno de ellos con raspones, pero no ameritó trasladarlo a un centro médico. En el rescate participaron 5 bomberos y miembros de la Cruz Roja.
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) insiste en que la ciudadanía debe tomar medidas de precaución, en especial en zonas con vulnerabilidad a inundaciones por saturación de alcantarillado.
Los lugares más comunes además de la 32 son la carretera entre San José y Caldera (Ruta 27), el camino de Ciudad Colón a Puriscal (Ruta 239) la conexión entre Rincón y Puerto Jiménez, en la Península de Osa (Ruta 245), la Costanera Sur (Ruta 34) y la carretera entre San José y la Zona Sur (Ruta 2).
Hay normas básicas que los vecinos o transeúntes de estas zonas deben acatar cuando se presenten las lluvias en las próximas horas, para así evitar quedar incomunicados, atrapados o incluso poner su vida en peligro.
Como por ejemplo el refugiarse en un sitio seguro en caso de escuchar tormenta eléctrica o percibir fuertes ráfagas de viento, así como posible caída de ramas y tendido eléctrico.