Playa Blanca de Paquera, Puntarenas, amaneció de luto y enojada, ya que a Deivid Brenes Marchena, de 25 años, lo mató en apariencia un vehículo y lo dejó abandonado en la calle con heridas expuestas en piernas y cara.
Brenes era bastante conocido en el vecindario. Lugareños recuerdan que el joven se dedicaba a la pesca junto a su papá, también por su fiebre al fútbol. Él era el menor de tres de hermanos y vivía con su madre.
“Este caso por jurisprudencia lo atendió la delegación de Nicoya (…) Encontraron el cuerpo de la persona ya sin vida, se presume que fue un atropello, pero en el sitio no había ningún vehículo, por lo que se cree que se dio a la fuga”, indicó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El cuerpo fue trasladado a medicatura forense para determinar con exactitud las causas del fallecimiento.
Marilyn Hernández, esposa de un tío del occiso, aseguró que la gasolinera de la comunidad tiene cámaras con posibles pruebas, pero no las pueden revisar hasta que el OIJ lo haga.
La familia del joven solicita colaboración económica para cubrir los gastos fúnebres, ya que afirma sentirse limitada en este momento. Las personas interesadas pueden realizar un sinpe móvil al número 8475-5167 a nombre de Yerlin Marchena Castillo, hermana del fallecido.
RECLAMAN
En redes sociales han trascendido varios comentarios donde señalan la irresponsabilidad de la persona que atropelló al veinteañero.
“Ya es costumbre matarlos y dejarlos tirados (…) La gente se da cuenta quiénes son los culpables, pero se callan porque no son un hijo, un hermano o algún allegado (…) Ya esto tiene que parar, no es justo”, comentó Ashley Mesén.
Otros usuarios manifiestan que a esa hora no transita tanto vehículo por el lugar, por lo que es necesario fijarse si en los alrededores alguien cuenta con cámaras que hayan grabado al vehículo.
“Qué cosas y se dan a la fuga, como si fuera cualquier cosa que atropellaron (…) Es un ser humano creación de Dios con una familia hermosa, hay cosas que uno nunca va a entender en esta vida. Un abrazo para esa familia que llora la pérdida de un ser querido”, dijo Bleisen Navarro.
Para Franci Dinarte, es un pecado que al peatón lo hayan dejado solo.
“Esa persona que lo atropelló y se fue a la fuga no debe estar tranquilo más cuando ve que murió el muchacho. Seguro huyó por el susto que se llevó”, indicó, por su parte, Rosa Porras.